Hace unos meses hablábamos ya de quitar el pañal y me lancé, le quité el pañal al peque con 2 añitos a finales de julio aprovechando el verano, el calor...ya sabeis, todos esos tópicos. Pero le está costando muchísimo. Creo, corregidme si me equivoco, que después de dos meses ya debería controlar más. Hay días que vamos estupendamente mientras no se sienta en la trona o sale a pasear claro (ya para dormir ni soñarlo) pero otros, como hoy, me pide mil veces, se sienta contento mil veces pero no hace ninguna y el resultado final es que se lo hace encima y ya me desespero.
Esta tarde, por ejemplo, se despertó de la siesta mojado como siempre pero ha hecho un buen pipí justo salir de la cama y después todas las veces he tenido que cambiarlo y limpiarlo (caca incluida porque esto ni lo pide) así que estoy desesperada a estas alturas. Se acerca el tiempo de ponerle más ropa y veo que no termina de habituarse.
Ya no sé qué hacer. No sé si volver a empañalar y si lo pide pues FIESTA y si no, no agobiarme o seguir insistiendo. Mi madre me comenta que aguante, que poco a poco pero ya son dos meses, mi marido tiene días y yo estoy que no sé qué es mejor. Siento que si lo vuelvo a empañalar es un retroceso (o más bien un fracaso) y que lo poco que hemos avanzado lo vamos a perder pero ya no puedo más con tardes como esta.
Además, cuando se sienta en la trona para comer o cenar se le olvida todo y se lo hace encima, claro que afortunadamente le pongo pañal, igual que cuando salimos a la calle ya sea en carrito o andando y por supuesto se niega a hacerlo en la calle porque solo quiere jugar y correr.
En fin, siento el rollo pero hoy estoy que muerdo y me faltaba la tarde de recoger pipís.