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por maras
#98831 Me pareció muy interesante.

La lactancia materna
La leche materna es por sí sola el mejor alimento y la mejor bebida que puede darse a un bebé menor de seis meses de edad. Este no precisará ningún otro alimento ni bebida, ni siquiera agua, durante este período.

La leche materna es por sí sola el mejor alimento y la mejor bebida que puede recibir un recién nacido. La leche de los animales, los preparados para lactantes, la leche en polvo, el té, las bebidas azucaradas, el agua y las papillas de cereales, son de inferior calidad.

La leche materna resulta fácil de digerir. También es el alimento que mejor promueve el crecimiento y el desarrollo y protege contra las enfermedades.

Incluso en climas secos y calurosos, la leche materna es suficiente para satisfacer las necesidades de líquidos de un lactante. No es necesario dar al bebé más agua o bebidas durante los primeros seis meses. Dar al lactante cualquier alimento o bebida distinto de la leche materna incrementa el riesgo de que pueda contraer diarrea y otras enfermedades.

Los sucedáneos de la leche materna que son adecuados desde el punto de vista nutritivo resultan onerosos. Por ejemplo, alimentar a un niño durante un año requiere 40 kilogramos (unas 80 latas) de preparación para lactantes. Los agentes de salud deben informar sobre su costo a todas las mujeres que consideren la posibilidad de utilizar sucedáneos de la leche materna.

Si el control mensual de peso indica que el crecimiento de un lactante menor de seis meses es insuficiente:
el niño necesita ser amamantado más a menudo. Por lo menos pueden resultar necesarias 12 tomas durante un período de 24 horas. El lactante debería mamar por lo menos durante 15 minutos.
puede que el niño necesite ayuda para poder colocar la mayor parte del pezón en la boca
puede que el niño esté enfermo y debería ser conducido a un agente capacitado de salud
puede que el agua u otros líquidos estén reduciendo la ingestión de leche materna. La madre debe amamantar exclusivamente a su hijo y no darle ningún otro líquido.

Todo lactante mayor de seis meses de edad necesita otros alimentos y líquidos. El amamantamiento debe continuar hasta que el niño tenga dos o más años de edad.


Existe la posibilidad de que las madres infectadas con el VIH/SIDA transmitan la enfermedad a sus hijos al amamantarlos. Las mujeres infectadas, o que sospechen la posibilidad de estar infectadas, deben consultar a un agente capacitado de la salud para que les someta a una prueba y les ofrezca orientación y consejo sobre cómo reducir el riesgo de infectar al recién nacido.

Es importante que todos sepan cómo evitar la infección con el VIH. Las mujeres embarazadas y las que son madres por primera vez deben saber que si están infectadas con el VIH pueden contagiar a sus bebés durante el embarazo, al dar a luz o por medio de la leche materna.

La mejor manera de evitar el riesgo de transmitir la infección es evitar contagiarse. Es posible reducir el riesgo de la transmisión sexual del VIH si las personas no practican el sexo, si las parejas no contagiadas solamente practican el sexo entre ellos o si las personas practican un sexo más seguro: sexo sin penetración o utilizando un condón.

Las mujeres embarazadas o las madres primerizas que están infectadas o sospechan que lo están, deben consultar con un agente capacitado de la salud para someterse a una prueba y recibir orientación.

Los recién nacidos deben estar cerca de sus madres y conviene iniciar la lactancia materna una hora después del parto.

El recién nacido tiene que permanecer en estrecho contacto con la madre el mayor tiempo posible. Las madres y sus hijos recién nacidos deben ocupar la misma habitación o la misma cama. El lactante debe poder mamar con la frecuencia que desee.

Iniciar la lactancia materna inmediatamente después del parto estimula la producción de leche de la madre. También contribuye a que el útero de la madre se contraiga, un factor que reduce el peligro de una hemorragia abundante o de una infección.

El calostro, la espesa leche amarillenta que se produce durante los primeros días después del parto, es el mejor alimento para los recién nacidos. Es nutritiva y contribuye a protegerles contra las infecciones. En algunos países se aconseja a las madres que no den este calostro a sus hijos, pero es un consejo equivocado.

El recién nacido no necesita ingerir ningún alimento ni líquido mientras espera que aumente la reserva de leche de la madre.

Si la madre da a luz en un centro de maternidad, tiene derecho a esperar que el recién nacido permanezca en el mismo cuarto durante las 24 horas del día y que su bebé no reciba ni preparación para lactantes ni agua si le está amamantando.


La producción de leche aumenta con la frecuencia del amamantamiento. Casi todas las madres pueden amamantar a sus bebés.

Muchas madres necesitan ayuda para iniciar la lactancia materna. Otra mujer que haya amamantado con éxito o un familiar, un amigo o un miembro de un grupo femenino de apoyo al amamantamiento, puede ayudar a la madre a superar sus dudas y evitar las dificultades.

La forma en que la madre sostiene a su hijo y la manera en que el lactante succiona el pezón son muy importantes. Sostener al lactante en una buena posición facilita la forma en que éste toma el pecho con la boca y succiona de una forma adecuada.

Las siguientes indicaciones permiten apreciar la posición correcta del lactante:
el cuerpo del bebé se mantiene vuelto hacia la madre
el bebé está cerca de la madre
el bebé está tranquilo y contento.
Una posición incorrecta puede causar problemas, como por ejemplo:
dolor o grietas en los pezones
insuficiente producción de leche
rechazo de la alimentación.
Indicaciones de que el lactante está alimentándose bien:
la boca del lactante está completamente abierta
la barbilla del bebé toca el pecho de la madre
es posible ver más piel oscura alrededor del pezón de la madre por encima de la boca del lactante que por debajo
el bebé succiona largamente y con fuerza
la madre no siente dolor en los pezones.
Casi todas las madres producen leche suficiente si:
amamantan de forma exclusiva
el lactante toma el pecho bien en una posición adecuada
el lactante mama con tanta frecuencia y durante tanto tiempo como lo desee, incluso durante la noche.
El recién nacido debe ser amamantado cada vez que lo desee desde el mismo momento del parto. Si un bebé duerme más de tres horas después de haber sido amamantado, es preciso despertarlo suavemente y ofrecerle el pecho.

Cuando un lactante llora no es señal de que necesite recibir otros alimentos o líquidos. Habitualmente, el llanto indica que el bebé necesita recibir mayores cuidados y de que le tengan en brazos más a menudo. Algunos bebés necesitan succionar el pezón simplemente para consolarse. Si el lactante tiene hambre, una succión más intensa producirá más leche.

Las madres que temen no tener suficiente leche a menudo dan a sus hijos otros alimentos o líquidos durante los primeros meses de vida. Pero el resultado es que el lactante toma el pecho con menos frecuencia, con lo cual se reduce la producción de leche materna. La madre producirá más leche si no da al niño otros alimentos o líquidos y le amamanta a menudo.

No se deben dar chupetes, muñecos o biberones a los niños que son amamantados, pues la acción de succionar un biberón es muy distinta de la que exige la lactancia materna. Utilizar chupetes o biberones puede disminuir la producción de leche de la madre e inducir al lactante a abandonar por completo la lactancia materna.

Es preciso tranquilizar a las madres y asegurarles que pueden alimentar a sus hijos pequeños exclusivamente con su propia leche. Para ello necesitan recibir estímulo y ayuda práctica del padre del niño, de sus familias, de sus vecinos, de sus amigos, de los agentes de salud, de sus empresas y de las organizaciones de mujeres.

El momento de amamantar al bebé puede ser una oportunidad para que la madre se tome un descanso. Los maridos y otras personas de la familia pueden facilitarlo animando a la madre a acostarse, en un lugar tranquilo y silencioso, mientras amamanta a su hijo. También pueden asegurar que la madre disponga de suficientes alimentos y ayudarla en las tareas del hogar.

La lactancia materna contribuye a proteger a los bebés y niños pequeños contra algunas enfermedades peligrosas. También ayuda a crear un vínculo especial entre la madre y el hijo.

La leche materna proporciona al recién nacido su primera “inmunización”. Contribuye a proteger al bebé contra la diarrea, las infecciones del oído y el pecho y otras enfermedades. La máxima protección se consigue cuando se alimenta al bebé exclusivamente con leche materna durante los primeros seis meses de vida y se le sigue amamantando hasta bien entrado el segundo año. Ningún otro líquido ni alimento proporciona esta protección.

Los niños alimentados con leche materna reciben por lo general más atención y estímulos que los que se alimentan por sí mismos con biberones. La atención ayuda a los lactantes a crecer y desarrollarse y contribuye a que se sientan más seguros.



La alimentación con biberón puede causar enfermedades graves o la muerte. Si una mujer no puede amamantar a su hijo, el lactante debe recibir leche materna o un sucedáneo de la leche materna en una taza limpia.
Los biberones y las tetinas sucias pueden provocar enfermedades como la diarrea o infecciones del oído. La diarrea puede ser fatal para los niños de corta edad. Hay menos probabilidades de que se produzcan enfermedades si los biberones y las tetinas se esterilizan con agua hirviendo antes de cada comida, pero un lactante alimentado con biberón sigue teniendo más posibilidades de contraer diarrea u otras enfermedades comunes que un lactante alimentado con leche materna.

El mejor alimento para un recién nacido que, por cualquier motivo, no pueda ser amamantado, es la leche extraída del pecho de su madre o de otra madre saludable. Es preciso darle esta leche en una taza abierta y muy limpia. Incluso los niños recién nacidos pueden ser alimentados con una taza abierta, que resulta más fácil de limpiar.

El mejor alimento para cualquier recién nacido que no pueda recibir la leche de su madre es la leche de otra madre que se encuentre saludable.

En caso de que no haya ninguna posibilidad de obtener leche materna, es preciso alimentar al bebé con un sucedáneo adecuado en una taza. Los lactantes que reciben sucedáneos de la leche materna corren un mayor riesgo de mortalidad o de contraer una enfermedad que los niños amamantados.

Alimentar al lactante con sucedáneos de la leche materna puede ser la causa de un crecimiento deficiente o de enfermedades si se diluyen en una cantidad excesiva de agua o si el agua no está limpia. Es importante hervir el agua y luego dejarla enfriar y seguir las instrucciones para mezclar los sucedáneos de la leche materna.

La leche animal o los preparados de leche para lactantes se dañan después de permanecer a temperatura ambiente durante algunas horas. La leche materna puede conservarse a temperatura ambiente ocho horas como máximo sin que pierda calidad. Guárdela en un recipiente limpio y tapado.


A partir de los seis meses de edad, aproximadamente, el niño debe empezar a recibir una variedad de alimentos complementarios, pero la lactancia materna debe continuar hasta bien entrado el segundo año de vida y prolongarse si es posible.

Aunque los niños necesitan recibir otros alimentos adicionales después de los seis primeros meses de vida, la leche materna sigue constituyendo una importante fuente de energía, de proteínas y de otros nutrientes, como la vitamina A y el hierro. La leche materna contribuye a proteger al niño contra las enfermedades durante todo el tiempo que el niño sea amamantado. Desde los seis meses hasta el primer año de edad, el niño debe recibir leche materna antes que cualquier otro alimento, para asegurar que ingiere una cantidad suficiente de leche materna todos los días. El régimen alimentario del lactante debe incorporar legumbres hervidas, peladas y hechas puré, algo de aceite, así como pescados, huevos, pollo, carnes o productos lácteos que contienen vitaminas y minerales. Durante el segundo año, debe ofrecerse el pecho después de las comidas y en otras ocasiones. La madre puede seguir amamantando a su hijo durante todo el tiempo que ella y el niño lo deseen.

Las orientaciones generales para la alimentación complementaria son:
Desde los 6 hasta los 12 meses: amamantar con frecuencia y dar otros alimentos tres veces al día.

Desde los 12 hasta los 24 meses: amamantar con frecuencia y darle cinco veces al día de los alimentos que consume el resto de la familia.

Desde los 24 en adelante: continuar el amamantamiento si tanto la madre como el hijo lo desean y alimentarle con las comidas que toma la familia cinco veces al día.

Los niños pequeños enferman con frecuencia cuando empiezan a gatear, a caminar y a jugar, y a beber y comer líquidos y alimentos que no son leche materna. Un niño enfermo necesita tomar mucha leche materna, ya que le proporciona un alimento nutritivo y fácilmente digerible en un momento en que ha perdido el apetito por otros alimentos.

Dar de mamar al niño también puede ser una manera de consolarle cuando está irritado.


Una mujer que trabaje fuera del hogar puede seguir amamantando a su hijo si lo hace con la mayor frecuencia posible cuando está con el lactante.

Si una madre no puede estar con su hijo durante su horario de trabajo, debe amamantarlo con frecuencia durante el tiempo en que se encuentren juntos. Un amamantamiento frecuente garantiza la producción de leche materna.

Si una mujer no puede amamantar a su hijo en el lugar de trabajo, debe extraer la leche dos o tres veces durante la jornada laboral y guardarla en un recipiente limpio. Es posible guardar la leche materna a una temperatura ambiente por un máximo de ocho horas sin que se estropee. Otra persona puede dar al niño la leche extraída por medio de una taza limpia.

La madre nunca debe alimentarlo con sucedáneos de la leche materna.

Las familias y las comunidades pueden exhortar a las empresas a que ofrezcan a sus trabajadoras licencia de maternidad, guarderías y el tiempo y el lugar necesarios para que amamanten a sus hijos o extraigan la leche.


La lactancia ofrece a la madre una protección del 98% frente al embarazo durante los seis meses siguientes al parto, a condición de que la madre no haya empezado a menstruar de nuevo, de que el bebé mame a menudo tanto de día como durante la noche, y de que el bebé no reciba regularmente otros alimentos y bebidas, o un chupete.
Cuanto más a menudo amamanta la madre a su hijo, más se retrasa la reanudación de la menstruación. Si una mujer amamanta menos de ocho veces en 24 horas o alimenta al niño con otros alimentos o líquidos o le ofrece un chupete, puede que el lactante se alimente con menos frecuencia del pecho materno y que la menstruación de su madre se reanude antes.

Puede ocurrir que la madre vuelva a quedar embarazada antes de reanudarse la menstruación. Es más probable que esto ocurra cuando ya han transcurrido seis meses o más desde el nacimiento del bebé.

La mujer que desee evitar un nuevo embarazo debe emplear otro método de planificación familiar si se da alguna de las siguientes circunstancias:
su menstruación se ha reanudado
el bebé ha empezado a tomar otros alimentos y bebidas o usa un chupete
el bebé ya ha cumplido seis meses.
Resulta mejor para la salud de la madre y del niño si evita volver a quedar embarazada de nuevo hasta que el hijo de menor edad cumpla dos años. Un agente sanitario o una partera cualificada deben ofrecer a los progenitores información en materia de planificación familiar.

La mayoría de los métodos utilizados para evitar el embarazo no afectan la calidad de la leche materna. Sin embargo, algunas píldoras anticonceptivas contienen estrógenos, que pueden reducir la secreción de leche. Un agente capacitado de la salud puede ofrecer orientación sobre los mejores tipos de anticonceptivos para una madre que amamanta a su hijo.

por maras
#98837 Siento ser pesada con este tema :oops: , pero es que me estoy documentando y cada vez la LM me parece más interesante, sé que las que estamos en este foro creemos que la LM es lo mejor para nuestros hijos, pero copio esto para aquellas que lo duden, he oído muchas veces "pero si es lo mismo"... pues no, no creo que sea lo mismo.

15 años después de la Declaración de Innocenti, la lactancia materna salva 6 millones de vidas anuales
GINEBRA/FLORENCIA, 22 de noviembre de 2005 - El amamantamiento salva todos los años 6 millones de vidas y las tasas mundiales de amamantamiento han aumentado en por lo menos un 15% desde 1990, según un informe publicado para conmemorar el 15to aniversario de la Declaración de Innocenti sobre la protección, el fomento y el apoyo de la lactancia materna.

Entre 1990 y 2000, los niveles de amamantamiento exclusivo entre los niños y niñas menores de seis meses en el mundo en desarrollo se han triplicado o cuadruplicado en algunos países.

UNICEF, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros aliados para la supervivencia infantil expresaron su satisfacción ante estos progresos al mismo tiempo que conmemoraron la aprobación de la Declaración de Innocenti en 1990, un documento sin precedentes firmado por 30 países que estableció nuevas y ambiciosas normas para definir el apoyo nacional a la lactancia materna.

"La lactancia materna exclusiva es uno de los instrumentos más poderosos que disponemos para combatir el hambre y la mortalidad infantiles", dijo la Directora Ejecutiva de UNICEF, Ann M. Veneman. "La Declaración de Innocenti impulsó un movimiento que ha contribuido a salvar millones de vidas y que nos acerca a los Objetivos de Desarrollo del Milenio".

Esta celebración está organizada de manera conjunta por la Autoridad Regional de Toscana y el Centro de Investigación Innocenti de UNICEF con un amplio número de aliados que incluyen el Comité Nacional de Italia en pro de UNICEF, organizaciones de las Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales como la Alianza Mundial pro Lactancia Materna, la Red de acción internacional sobre alimentos para lactantes, entre otras, y un grupo de expertos internacionales.

Veneman dijo que los logros desde que se proclamó la Declaración de Innocenti deben servirnos de inspiración para ampliar las medidas destinadas a llegar a las madres y los niños vulnerables. Alabó la dedicación de una amplia comunidad de defensores de la lactancia materna, que han trabajado sin descanso para convertir en realidad las promesas de la Declaración Innocenti y la Iniciativa de hospitales amigos de los niños.

Gracias a sus actividades, cerca de 20.000 hospitales en 150 países se han convertido en "amigos de los niños", más de 60 países disponen de leyes o regulaciones para poner en práctica completa o parcialmente el Código Internacional de Comercialización de los Sucedáneos de la Leche Materna, y muchos países tienen alguna autoridad nacional dedicada a la lactancia materna.

Pero los aliados de Innocenti advirtieron que el objetivo original de la Declaración no se ha alcanzado todavía. Por ejemplo, solamente un 39% de los recién nacidos en los países en desarrollo reciben amamantamiento exclusivo. La principal responsabilidad recae en la falta de información entre las madres, y la falta de apoyo de los trabajadores de la salud y las comunidades.

La lactancia materna ofrece a un bebé la alimentación ideal durante los primeros meses de vida, así como una inmunidad clave contra enfermedades mortales como la neumonía. Los lactantes deben recibir amamantamiento exclusivo desde el nacimiento hasta los seis meses, y luego ser alimentados con leche materna junto a otro tipo de alimentos apropiados para su edad durante dos años y después.

Lograr este objetivo será un impulso extraordinario para los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Se calcula que casi una quinta parte de las muertes infantiles podrían prevenirse si se alcanza este objetivo, y se salvaría a 2 millones de niños y niñas cada año.

El nuevo informe de Innocenti, publicado por UNICEF, OMS y otros especialistas en alimentación infantil, pide una mayor intervención de los gobiernos e inversiones para proteger la lactancia materna exclusiva.

También advierte que las madres y los niños afrontan nuevos peligros, entre ellos un número cada vez mayor de situaciones de emergencia y el aumento constante del VIH/SIDA. Es preciso prestar apoyo a las madres para que proporcionen a sus hijos la mejor alimentación y los gobiernos necesitan urgentemente integrar en las políticas nacionales las últimas estrategias sobre madres VIH-positivas y la alimentación infantil.

"En tiempos de crisis, las prácticas de alimentación adecuadas para la infancia son la clave para salvar vidas", dijo Veneman.

por maras
#98839 Ya el último en serio :oops: Es una entrevista muy interesante.

Proteger, promover y apoyar la lactancia maternanext Entrevista con la Dra. Miriam Labbok, Asesora Superior sobre alimentación y atención a los lactantes y los niños de corta edad del UNICEF


P: ¿Por qué es importante la lactancia exclusiva durante los primeros seis meses de vida?
Labbok: La lactancia materna proporciona una amplia variedad de beneficios y es de gran importancia para la supervivencia, la salud, la nutrición y el desarrollo infantil. Además, ayuda al espaciamiento de los nacimientos y al mantenimiento de la salud materna. Los lactantes que son amamantados en los primeros meses de vida tienen como mínimo seis veces más probabilidades de sobrevivir que los que no lo son, ya que la leche materna reduce de manera considerable la tasa de mortalidad por enfermedades infecciosas como la diarrea y las infecciones agudas de las vías respiratorias, dos de las principales causas de muertes infantiles en el mundo.
La leche materna contiene todos los micronutrimentos y los nutrientes que necesitan los lactantes para crecer durante los primeros seis meses de vida. Por otra parte, la interacción que se da entre la madre y su bebé cuando ésta lo amamanta tiene repercusiones positivas durante toda la vida, tanto en lo que respecta a la conducta, la expresión oral y la interacción social como en lo que se refiere a la salud, ya que reduce las enfermedades crónicas como la diabetes y el cáncer. Por último, si una mujer infectada con el VIH aplica la lactancia materna exclusiva con su bebé, los riesgos de que el lactante contraiga el virus por vía de la leche materna se reducen de manera considerable.

P: ¿Por qué los sucedáneos de la leche materna no son una opción aceptable?
Labbok: En primer lugar, los sucedáneos sólo reemplazan la mayor parte de los componentes nutricionales de la leche materna en el mejor de los casos. La leche materna va cambiando según la hora del día, la duración de la toma y la edad del lactante. Por otra parte, la leche materna contiene sustancias que contribuyen a la inmunidad pasiva, y cuando los lactantes son amamantados reciben de su madre células vivas activas que ayudan a combatir las enfermedades.
En segundo lugar, el aparato digestivo del bebé tiene dificultades para absorber sustancias extrañas durante los primeros meses de vida. Basta con una ración de un sucedáneo de la leche materna u otro alimento para causar pequeñas laceraciones en el aparato digestivo que pueden demorar semanas en curarse. En el mejor de los casos, los sucedáneos afectan a las células vivas y las bacterias normales que habitan en el sistema digestivo y ayudan a la digestión. Además, el acto de amamantar en sí mismo estimula el crecimiento adecuado de la boca y la mandíbula, así como la secreción de hormonas que ayudan a la digestión y provocan sensación de saciedad.
Por último, la leche materna contiene cientos de sustancias que no se pueden incorporar en los sucedáneos; desde bifudus activo, que favorece el crecimiento del aparato digestivo, y ácidos grasos de cadena larga, que contribuyen al crecimiento del cerebro, hasta hormonas y enzimas que favorecen el desarrollo. Se ha demostrado que las personas adultas que fueron amamantadas durante la niñez obtienen mejores resultados en distintas pruebas de inteligencia y conducta. Asimismo, no existe ninguna investigación que indique ventaja alguna de la alimentación con sucedáneos respecto de la lactancia materna.

P: ¿Cuáles son las normas y las conductas óptimas para la alimentación?
Labbok: La Organización Mundial de la Salud y el UNICEF recomiendan la lactancia materna como alimentación exclusiva durante los primeros seis meses de vida, y que se prolongue hasta los dos años o más acompañada de alimentos complementarios. Cuando se incorporan dichos alimentos, la madre debe amamantar primero a su bebé y luego ofrecérselos en pequeñas cantidades. Los alimentos complementarios deben ser ricos en micronutrimentos, especialmente hierro, y deben contener muchas proteínas y calorías.
La incorporación de los alimentos complementarios debe ser un proceso metódico y sostenido, ya que el estómago de un lactante es muy pequeño. Por lo tanto, dicho proceso debe comenzar con la incorporación de una a tres porciones diarias de alimentos además de la leche materna, y aumentar gradualmente hasta alcanzar las cinco porciones diarias cuando el lactante cumpla el primer año de vida. Si se cuenta la leche materna por un lado y las porciones de alimentos complementarios por otro, la madre de un lactante de seis meses de edad deberá alimentarlo un promedio de 10 a 12 veces por día. Ese promedio irá disminuyendo gradualmente hasta llegar a las cinco a siete veces por día a medida que el estómago crece y el lactante se acerca a los dos años de vida. El proceso de destete sostenido también es importante para la madre, dado que su organismo experimentará transiciones a medida que recupera el calcio y los nutrientes.
P: ¿Qué consecuencias tiene la lactancia materna para la salud de la madre?
Labbok: La lactancia materna favorece la salud de la madre en el periodo inmediatamente posterior al alumbramiento, porque ayuda a que el útero se contraiga más rápidamente, y así reduce las pérdidas de sangre. Para muchos especialistas, ésa es la etapa final del alumbramiento. En el corto plazo, la lactancia materna retrasa el retorno de la fertilidad, mientras que a largo plazo disminuye los riesgos de contraer cáncer de mamas, de útero y de ovario. Una vez que la lactancia se ha establecido, las mujeres con frecuencia se sienten muy bien anímicamente, ya que tienen mayores niveles de prolactina (una hormona relajante) y de oxitocina (una hormona afiliativa).

P: ¿Cuáles son las labores que lleva a cabo el UNICEF para fomentar, proteger y apoyar la lactancia materna?
Labbok: El UNICEF lleva a cabo dos programas: la Iniciativa para hospitales amigos de los niños y el Código Internacional para la Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna. Si bien las tasas de lactancia materna temprana son elevadas (más de un 90% de las mujeres amamantan inicialmente a sus hijos), la proporción de madres que mantienen la lactancia exclusiva y posteriormente siguen amamantando a sus hijos por períodos prolongados puede descender de manera abrupta en algunos contextos.
El principal problema está constituido por las presiones comerciales y sociales para interrumpir la lactancia, las cuales se ven agravadas en muchas ocasiones por las recomendaciones médicas inexactas del personal sanitario que carece de capacitación y aptitudes para el apoyo de la lactancia materna.
A fin de contrarrestar la intensa comercialización y promoción de los sucedáneos de la leche materna por parte de sus fabricantes, el UNICEF colabora con legisladores y abogados en diversos países para respaldar las leyes que contemplan al Código de Comercialización. La Iniciativa para hospitales amigos de los niños se puso en marcha en 1991 y se ha ampliado para incorporar una serie de evaluaciones y talleres de capacitación. Como consecuencia de esto, más de 19.000 hospitales de todo el mundo ya recibieron la designación de hospitales amigos de los niños.
Las presiones sociales son más complejas y varían según el lugar donde viva la madre. Las mujeres luchan por los derechos relativos a la maternidad y emplean otros métodos para continuar con las prácticas óptimas de alimentación de sus hijos, y poder contrarrestar así las presiones cada vez más fuertes para que regresen al trabajo y se separen de sus bebés.
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por PilarBcn
#99000 Gracias, Maras!!!! Te has pegado una gran currada y eso siempre se agradece, pero además el tema es de interés general, un documento imprescindible.

:26:

MIS HIJOS ME LLENAN LA VIDA...
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por AranAlex
#99010 Maras, muchsa gracias, son muy interesantes y en especial me ha gustado el primero, ¿nos puedes poner la fuente?

Aran, mamá de Álex

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por maras
#99085 Sí, lo siento, mucho, se me olvidó poner la fuente :oops: Se trata de la propia web de unicef, dentro de la misma hay un apartado que se llama Para la vida y aqui se habla de la LM, es el primer artículo http://www.unicef.org/spanish/ffl/index.html

El resto es de la misma página de unicef en la parte de prensa.
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por mami cris
#99218 Maras eres un solete!!! :fl
Gracias por ponernos algo tan intererante ( me lo he impreso, para leerlo con tranquilidad en casa) ;-) ;-)
Aunque lo podrías haber resumido!!! :mrgreen: :mrgreen: (es broma!!)

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