Yo me solté la melena desde el principio al nacer mi hija mayor, hace 5 años, más por necesidad que por convicción, y al principio estaba bastante cortada.
Pero con Pau he dado el pecho en todas partes desde el primer día y nunca se lo he negado a pesar de que a veces las circunstancias han sido un poco cortantes: Unas vacaciones me encontré con mis jefes, y el niño pidió teta. Yo se la dí, pero un poco cortadilla
Ahora, cada vez estoy más desmelenada. Doy el pecho a mi hijo con mucho orgullo. Creo que es lo más bonito del mundo, una madre amamantando a su hijo.
Estuve en la concentración de madres amamantando a sus hijos en el Parque de la Ciudadela de Barcelona, y no veas cómo disfruté!!!!
Besos,
Pilar