En este último caso son 8 cereales con miel, el panfleto y la etiqueta dicen: a partir de 5 meses...¡Dios!, 8 cereales, 6 de ellos con gluten y dicen a partir de 5 meses...primera cosa para llorar. Segunda cosa para llorar: a la pregunta de ¿le puedo dar miel? La respuesta es (la escribo literal): la miel es un alimento muy completo, de origen totalmente natural, ya que es fabricada por las abejas a partir del néctar de las flores. Es rica en fructosa y en glucosa, azúcares fácilmente asimilables y que son fuente de energía inmediata. También es rica en minerales y en vitaminas, sobre todo del grupo B y en vitamina C. La miel, mezclada con los cereales en una cantidad adecuada, proporciona un gran aroma y sabor a la papilla que aumenta su aceptación por parte del bebé.
Y ya está, nada de que la miel puede contener esporas del botulismo,
"la miel consumida por lactantes puede provocar botulismo, enfermedad que afecta al sistema nervioso central produciendo una parálisis generalizada(...) el niño babea, pierde el control de la cabeza y no mantiene los ojos abiertos;el tres por ciento de los casos es irreversible" (fuente: El pediatra en casa, Dr Marcos Mercado, ed Grijalbo)
Decir que sí se le puede dar miel a los niños menores de un año es una total irresponsabilidad, la mayoría de las madres se fían de estas publicidades, no buscan información complementaria como hacemos nosotras. Qué pasa si una mamá lee eso y le da a su bebé miel que ha comprado a la vecina de su pueblo y que da la casualidad de que tiene esas esporas...Dios, no quiero ni pensarlo.
Es triste, ojalá algún día las asociaciones de celíacos y demás afectados ganen una demanda a las compañías alimentarias por sus potitos de inicio "a partir de 4 meses", cereales sin gluten "a partir de 4 meses", cereales con gluten "a partir de 5 meses"
Recuerdo cuando estudiaba la carrera (ingeniería técnica agrícola) y se decía entonces que la agricultura ecológica nunca prosperaría mientras estuviera la fuerte industria química de fertilizantes; hace muy poco los agricultores ecológicos ganaron una denuncia a compañías tan importantes como Danone y Pascual y se les obligó a retirar de sus productos el nombre "bio" (esto es de origen biológico, no químico ni farmacológico) por inducir a error en los consumidores, este nombre sólo puede ser empleado en productos de origen ecológico (biológico). Dichas empresas tuvieron que gastarse millones en nuevo etiquetado y publicidad, "bio de Danone" ahora se llama "Activia", y "Pascual bio" es "Pascual funciona".
Ojalá la historia se repita.
Saludos
Edito porque no puse la editorial del libro