Pero al hacer la entrevista el otro día, la cuidadora de Héctor, al decirle que dormía con nosotros (preferimos ser sinceros), que no se solía dormir solo, pues adivinad qué libro nos recomendó (el Duérmete niño, por supuesto). Creímos que nos daba algo, y no sabemos qué hacer.
Una cosa es saber que en la guardería no le van a tener todo el día en brazos, porque son 8 niños para una cuidadora y otra cosa es saber que vas a dejar a lo más preciado que tienes con una persona que te recomienda el dichoso librito. Lo malo es que no es la única ni mucho menos. Cada vez que hablamos con amigos, vecinas, etc., nos recomiendan el librito de marras. Creemos que se está convirtiendo en algo peligroso, ya que la gente lo aplica con mucha ligereza.
Qué caca de mundo...
Besos a tod@s
Joaquín, Héctor, Esther, Benito y Chema