Pues cuando le daba la cena a mi hija le conté que la iaia-gran (la abuela mayor) se habia caido y se habia hecho daño. Se me quedó mirando muy seria y me dice "iaiaaan, pupa; iaiaaan, pupa" mientras se señalaba la rodilla (de momento ella solo se hace daño en la rodilla ) y se le empezaron a turbiar los ojos y se me puso a llorar mientras repetia una y otra vez iaiaaan, pupa . Y yo diciendole que la iaia-gran estaba bien. Así que mientras terminaba de cenar llamamos a la iaia-gran, le comenté la situación con 4 frases (y que luego ya la llamaria con más calma), mi abuela diciendole a la peque (21 meses) que estaba bien, que la pupa era pequeña,... y más o menos se conformó.
Cuando nos fuimos a la cama, cogimos un libro, en él hay fotografias de niños haciendo actividades cuotidianas (me va muy bien porque la ultima imagen es un niño durmiendo ), pues una imagen se ve un niño regando una flor.
Cuando estamos en el pueblo mi hija "ayuda" a regar las plantas a mi abuela. Vio la foto y se puso a llorar "iaiaaan pupa, iaiaaan pupa". La tranquilize y le recordé que cuando ella se hacia daño la mama le daba un beso magico, y que le ibamos a mandar un beso muuuy fuerte a la iaia-gran para que se curara. Y así estuvimos mandando besos durante un buen rato.
Le costó conciliar el sueño. Y en una de las mil vueltas que dió, mandó un beso...