El fin de semana he dormido con él toda la noche (como hacía en el pueblo) he dormido con él las siestas y no me he ido a trabajar. Resultado: un niño durmiendo plácidamente.
Porqué no escuchamos? Porqué no vemos? Era muy sencillo, me echaba de menos. Han sido muchos cambios para un cuerpecito tan pequeño. Y esto no tendría importancia si no fuera porque he llegado a desesperarme, a gritarle, en fin, que perdí un pelín los papeles .
No penséis nunca que lloran sin motivo. Siempre lo hay:dientes, angustia, miedo, necesidad de estar con su mamá...Siempre la solución es la misma. Mantener la calma, ser muy pacientes y aprender a escucharlos.