- Dom, 04 Ago 2024, 12:34
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Buenos días, mi nombre es Raquel, encantada de saludarte. Soy alumna en prácticas de la formación de sueño de CESI. Además, soy farmacéutica especializada en sueño, descanso y estrés. Y, mamá, de un peque de casi 10 meses. Espero poder ayudarte.
Entiendo perfectamente tu situación, para tranquilizarte lo primero decirte que lo que os ocurre es bastante normal, aún así podemos intentar mejorar la situación para que toda la familia se encuentre mejor.
Por lo que puedo leer, el problema que te gustaría abordar son los despertares nocturnos, especialmente los desvelos nocturnos.
Lo primero que me gustaría es descartar posibles causas o desordenes del sueño:
- ¿Dermatitis atópica? ¿Alergias alimentarias?
- ¿Podrías sospechar de parásitos intestinales? ¿Bruxismo (rechinar de los dientes)?
- ¿Podrías sospechar de pesadillas? ¿O terrores nocturnos?
Ante cualquier sospecha habla con tu pediatra de confianza.
¿Cómo podemos hacerlo?
- Trabajar en el sueño diurno, para lograr siestas regulares y sobre todo reparadoras. Un buen sueño diurno favorecerá el sueño nocturno. Un bebe de esta edad más o menos debería hacer 1-2 siestas. Por lo que leo en tu ficha las siestas no son regulares.
Para ello puede ser muy útil una agenda de sueño.
https://fapap.es/files/641-1434-RUTA/figura1.jpgSegún la información aportada en la Agenda de sueño, favorecer las siestas cuando el bebe muestre los primeros signos de cansancio.
Una vez rellena la agenda de sueño podemos ver cuáles son las mejores horas para dormir al peque, y establecer esas ventanas de sueño, para que los días sean menos caóticos.
Además, también es clave (si no lo haceis ya) introducir rutinas presueño, que mejoren la predisposición del peque al descanso. No tienen que ser rutinas largas ni complicadas. Simplemente un patrón que se repita todas las siestas, y noche, de forma tranquila. Por ejemplo: puede incluir un masaje suave, una canción, despedidas de juguetes, un cuento.
- Cuidar el ambiente de sueño, tanto en las siestas como por la noche. Es importante que el ambiente sea de relajación: luces tenues, ruidos moderados, actividades tranquilas.
Además, también hay que revisar que la habitación tenga la temperatura adecuada 18-22 ºC, humedad entre el 40 y 70%, y este bien ventilada.
Os propongo empezar por aquí, unas dos semanitas para mejorar el sueño diurno, una vez conseguido podemos pasar a la siguiente fase.
- Disminuir los despertares nocturnos, en este caso, mejorando el sueño diurno quizá mejoren los despertares nocturnos.
Se puede probar un par de semanas a que sea el otro progenitor el que duerma justo a su lado, no dejar la teta tan disponible, a ver si de esa manera se reducen los despertares.
También puedes probar a darle de mamar justo antes de que te vayas tu a dormir, espabilarle un poco o incluso dormido, y ver si así aguanta un poquito más esa primera parte de la noche, reduciendo 1 despertar.
- Mejorar los desvelos nocturnos, lo primero sería intentar redormir al peque lo más rápido posible, para que no se active demasiado. Esto es más fácil si lo haceis colechando como ya comentas que haceis.
El hecho de que esté inquieta y llorando durante estos despertares indica que puede haber factores adicionales, como incomodidad física, ansiedad por separación o un ambiente de sueño no óptimo. Revisaría cada punto de estos.
Durante los despertares nocturnos, acaríciala, háblale suavemente y asegúrale que estás allí. Además puedes introducir un objeto de apego, como una mantita o un peluche que pueda ayudar a tu peque a sentirse segura y reconfortada.
Espero que os sirvan estas propuestas para mejorar poco a poco el sueño de toda la familia, para lo que sea, estoy a vuestra disposición.
López, R. (2024) Sueño de 1-2 años. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI).
Jové, R. (2006). Dormir sin lágrimas. La Esfera de los Libros.