Mi inquietud ahora es que, cuando no estamos en casa, el pkbb es tan cotilla que ya puede estar muerto de hambre, que apenas churrepetea un poco. Le puede el mirar y observar todo lo de su alrededor. Sí, yo también pienso que cuando esté en casa, ya tomará más y mejor. Pero no. De eso nada. En casa llega pasado de estímulos (y en la calle va en el fular. X lo que observa lo que quiere desde la seguridad de mami), pasado de sueño (como tiene hambre, no se duerme), pasado de hambre... Se le junta todo y se "cortocircuita". Incluso la cosa suele acabar en berrinche del quince cuya duración puede ser desde 10min. a 1 hora... Obviamente con estos calores, a todo lo anterior hay que sumarle el calor agudizado x el llanto.
Mi duda es, ¿cómo hago para evitar ese círculo vicioso? Ya he probado de enchufarle el pecho aunque no lo pida, cuando aún no está nervioso. Me he ido a "sitios más tranquilos" (incluso al WC) para ver si así comía... Nada, no he conseguido nada. Y claro, se me parte el alma cuando llegamos al momento berrinche. Ya que ahí si que cuesta una barbaridad. Se que no es lo mismo llorar en brazos que sólo en el cochecito o la cuna, pero eso no me consuela en pleno lloro desenfrenado...
¿Se os ocurre algo?
Una vez más, gracias!!!!