- Vie, 08 Mar 2013, 17:45
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Kim, una cosa no está reñida con la otra. La conmemoración del día 8 es un recordatorio de una necesidad permanente de reivindicar unos derechos que por más que se nos diga que se nos están otorgando en realidad se nos niegan. Algo tan básico como que la crianza de un hijo sea compartida al 100% con una baja incentivada a ambos progenitores y obligatoria de igual duración es una muestra de todo el camino que aún queda por recorrer. A pesar de ello, es necesario un día en el que no sólo se felicite a las mujeres que salimos de casa para ir al trabajo, sino también a las que se quedan para cuidar de sus hijos, para ocuparse de la familia, porque eso también es un trabajo, poco reconocido y valorado, pero tan importante como el que desempeñamos el resto.
Es un día de celebración y de conmemoración que debemos lograr que deje de serlo porque la igualdad de derechos sea un hecho. Mientras tanto, felicitémonos por no olvidar, por seguir ahí al pie del cañón, porque nuestra lucha, callada o a gritos, persiste y porque a pesar de todas las inmensas trabas que la sociedad nos pone, seguimos en la brecha.
Por las que nos precedieron, por las que sucumbieron en el intento, por las que no tienen voz, por las que gritan desgarradoramente o simplemente para acallar el ruido que nos rodea e intenta que quedemos en silencio. Por todas nosotras y por que en el futuro no sea preciso un día especial para las mujeres trabajadoras.
Feliz día reivindicativo.Salud
