Destaco un párrafo:
"El amamantamiento de los bebés, la respuesta cuando lloran, el contacto físico casi constante y el que haya varios adultos que se ocupan de la crianza son algunas de las prácticas de crianza ancestrales que han demostrado su impacto positivo en el desarrollo del cerebro, lo cual no sólo moldea la personalidad sino que ayuda además en la salud física y el desarrollo moral", dijo Narváez.
Los estudios, añadió, muestran que la respuesta a las necesidades del infante, sin dejarlo que "se canse de llorar", influye en el desarrollo de la conciencia, y que el contacto físico positivo afecta la reacción al estrés, el control de los impulsos y la empatía.
"Gigoló" (vividora) de la maternidad
¡Va por Queli!
Yo de mayor quiero ser.... EMPODERANTE
¡Va por Lolilolo!