- Jue, 13 Dic 2012, 22:54
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Kim estoy completamente de acuerdo con lo que decís tanto tú como maca. La motivación en clase es cuestión de los profesores (lo he sido de adolescentes y sé lo importantísmo que es). También debo decir en honor a la verdad que hablé con Rodrigo y le dije más o menos algunas cosas de las que me habían hablado sus profesoras, se lo expliqué de manera que comprendiese que es divertido contar lo que se hace porque podemos comparar lo que yo hacía en el cole con su edad y lo que hace él ya que su cole fue el mío (vamos como un juego) y de momento me ha ido contadon cosas, yo por mi parte me he mostrado entusiasmada con el bingo en inglés, le he dicho que me tiene que enseñar... también le expliqué la importancia de mostrar algo más de atención en clase, sobre todo para que luego me enseñé a mí (vamos que va a ser mi maestro). No se trata de que esté constantemente atento, es un niño y es normal distraerse, pero sí que vaya viendo poco a poco que tiene que ir haciéndolo porque a lo mejor se pierde algo intersante y divertido. Ya os diré si funciona o no.
Lo de el reloj minutero de horno sí que se lo compré y está dando buen resultado porque lo ve como un juego, lo usa incluso para cenar poniendo el tiempo que a él le parece. Hemos conseguido hacer los deberes en 20 minutos con pequeñas distracciones pero con interés por su parte. Vamos que a diferencia de otros días no hemos estado más de una hora y pico, el sentado en su mesa y yo en la mía, mirándo las musarañas, el lápiz, la goma y yo "Rodrigo, los deberes". Se ha sentado, se ha puesto a hacerlos, cuando ha sonado el reloj, le hemos dado más tiempo y ha seguido concentrado en su tarea. Lo ve como un juego y eso hace que no sienta presión sino que es como las carreras que hacemos para vestirnos por la mañana
Por lo que respecta a las profesoras, debo decir que su tutora tiene tablas, había visto cómo es realmente Rodrigo, entendía que se distrajese, me dijo que el ritmo que actualmente se imponía a los niños es estresante y que siguen siendo muy niños para asimilar semejante rutinas. Lleva una clase más interactiva con los niños y se ve que tiene mano y no se queda en lo normativo sino que va más allá. Otra cosa es la de lengua y mates. No sé si llegará a los 30, es mar rígida con el tema de alcanzar objetivos y de centrarse en los conocimientos y en lo externo. No creo que se haya planteado cómo son sus alumnos, puesto que mientras que su tutora había detectado los rasgos de personalidad de Rodrigo, ésta simplemente consideraba que era inquieto y que se distraía. Vamos dos maneras muy distintas de enfocar la enseñaza. Me quedo con su tutora primero porque ve más allá de la superficie, porque empatiza no sólo con el niño sino también con los padres y todos los argmentos y explicaciones que le di sobre la manera de ser de Rodrigo y sobre cómo estaba intentando educarle los aceptó con completa normaliad. Me recomendó lo de las estrellas y lo del reloj no en plan supernay, sino también como una especia de estrategia para motivarle, porque, seamos sinceras, yo puedo usar esas herramientas como un instrumento para potenciar la disciplina o como un juego haciendo real la máxima de prodese/delectare o en cristiano, enseñar deleitando y así las vamos a empelar.
Gracias a todas por lo que me habéis dicho, ya os iré contando. Por cierto Kim, chapeau por el cole de tu peque!
Salud