Hoy teníamos dentista. Hoy le han realizado una pulpectomía. ¡Y ha sido un valiente y un campeón!.
Hace unos días se quejó así que le llevamos al dentista. En la revisión se portó fenomenal pero el diagnóstico fue devastador para mi. Tenía un flemón y varios empastes más. Le tenían que hacer una pulpectomía, ver cómo evolucionaba y en función de lo que suceda quizás le tengan que extraer esa pieza y ponerle un mantenedor de espacio.
El día que fuimos a hacerle la pulpectomía se la retrasaron. El flemón seguía mal. Ese día le "hurgaron" un poco y tampoco se quejó. Un campeon de nuevo.
Y yo cada vez más impresionada, porque ya sabeis el pánico que ha tenido siempre mi hijo mayor a las batas blancas y lo que le costó superarlo.
Hoy era la prueba defnitiva. Si hoy lo llevaba bien ya era la caña. Yo estaba frita, negra, nerviosa. (De hecho ya tenía en mente un plan B con los datos de una odontopediatra por si lo de hoy resultaba un desastre). Me he mareado y todo en la sala de espera. La dentista solo me dejó entrar el primer día. Cuando supe/supimos (siempre ha venido su padre también con nosotros) no nos hizo nada de gracia, pero decidimos probar puesto que en la revisión había estado bien y parecía sentirse cómodo con la gente.
Y hoy me ha demostrado que es un campeón y un valiente y que me asombra, como siempre.... Se ha quejado un pelín al final del todo y eso que han estado una hora en la consulta y nos ha dicho la dentista que era casi más ya por cansancio. Al salir, en el ascensor nos ha estado contando que le han hecho un poquito de daño, pero lo contaba con tranquilidad y naturalidad. Y en casa yo le he preguntado si su dentista era cariñosa con él y me ha dicho que sí (yo es que la veo pelín estirada, pero sí que es cierto que les oigo hablar con cariño y bien).
Aún nos quedan varias visitas. Revisión de la pulpectomía para valorar su éxito o no y varios empastes.... pero hoy estoy muy muy orgullosa de mi hijo mayor.
"Gigoló" (vividora) de la maternidad
¡Va por Queli!
Yo de mayor quiero ser.... EMPODERANTE
¡Va por Lolilolo!