- Vie, 23 Dic 2011, 10:25
#400719
Hola chicas.
Gracias a todas por el interés. Todo está en orden. Ufff.
Bueno, os cuento un poco de la historia porque ayer no me dio tiempo:
Resulta que desde que nació el chiquitín en abril venía pasandolo bastante mal, en estado semi-depresivo. Era consciente de que todo iba a ser muy duro pero tantas noches sin dormir y el agotamiento, unido al postparto y a toda la retólica de opiniones desfavorables que tenía a mi alrededor (salvo mi madre), me habían sumido en un pozo.
Después del verano todo empezó a cambiar. Os encontré y el cielo se abrió. Había más gente como yo! No era un bicho raro!
Además de esto, que ha sido fundamental en mi maternidad, mi médido de cabecera me mandó una analítica completa donde se incluían valores de endocrinología, y descubrió que tenía alteración del tiroides, que por otra parte debe ser normalísimo después del embarazo.
Bueno, pues me derivó al endocrino y este me puso medicación y control mensual, para saber si efectivamente la alteración del tiroides era simplemente postparto o genética.
En noviembre, me bajaron la dosis de la medicación y todo iba bien hasta que el miercoles me hice nuevos análisis. El propio laboratorio donde se analizaron los resultados me llamó al móvil esa misma tarde para advertirme de valores muy por debajo de lo normal, insistiéndome en que era "urgente" que acudiera a mi médico. Yo no entendía la "urgencia" porque me encuentro bien (la verdad es que el cansancio ha pasado ya a ser un estado natural en mí pero lo tengo asumido porque mi peque aún se despierta muchas veces por la noche y es de altísima demanda también durante el día) pero la cosa ya me mosqueó cuando ayer la propio endocrino me llamó pidiéndome que acudiera el mismo día y cuanto antes a la consulta, que es cuando abrí este post.
Total, que se ha confirmado que mi alteración tiroidea es genética y que la medicación es de por vida, pero que vamos, no es nada grave ni muchísimo menos. La urgencia, según me explicó la endocrino, residía en que unos valores tan anómalos en mi analítica suponían que como mínimo se suponía que tendría que estar en la cama sin poder moverme de puro agotamiento!!!!
Resumiendo, pastillita al día y control de vez en cuando para ajustar dosis y por lo demás, fresca y lozana como una lechuga.
Gracias a todas por escucharme y preocuparos por mí, hace muy poco que os he "conocido" pero ya tengo la confianza suficiente como para contaros cosas personales. Habéis sido fundamentales, el punto de inflexión en mi caída.
Gracias de corazón.