Bueno, a lo que ha cambiado: antes se levantaba tanto por la mañana como después de las siesta con buen humor, con ganas de jugar y así hasta que le entraba otra vez el sueño y empezaba irritarse (lo cuál estaba totalmente dentro de lo normal). Ahora desde hace un par de semanas ha reducido sus horas de sueño nocturno de 11-12 a 10-11 y la siesta de medio día de 2-3 horas a una hora y media más o menos. Se despierta y desde el primer minuto ya está de mal humor. Consigo que esté más o menos activo o por lo menos sin quejarse como media hora. Pero lo logro cambiando de habitación, buscando una distracción nueva, cambiando el pañal, etc.
Es un niño bastante inquieto/movido desde el nacimiento y nunca ha estado tranquilo en los brazos. O sea que eso tampoco funciona. Lo cojo y no hace más que moverse/quejarse. Me da la sencación que aunque parace que duerme lo suficiente el hecho que últimamente ha acortado sus siestas hace que no ha descansado lo suficiente. Otras posibilidades que se me ocurren son que tuvo hace poco un catarro e igual le afecta aún. También tiene ya 4 dientes y veo que le está a punto de salir uno más. Y está cada vez con más movimiento y más consciente de todo. Igual es que quiere hacer más de lo que puede.... no lo sé pero son unos días muy agotadores pues requiere continuamente mi atención. No sé si otros han pasado por una temporada así. Porque pienso que será una temporada y cambiará.... en todo caso mientras sigue así tenéis ideas de lo que hacer? Cuándo se despierta de las siestas y parece que aún tiene sueño no consigo que siga durmiendo de ninguna manera (ni con la teta, ni cogiéndolo un rato, con nada). No sé si vale la pena siquiera intentarlo. Estará ajustando sus siestas y una vez que lo logre le pasará? A ver si me podéis contar alguna experiencia vuestra.
Saludos, Tiina