Les escribo porque mi niñito de 1 año 9 meses no me deja salir ni a la esquina. La niñera viene tres veces a la semana y esos dias aprovecho a hacer cosas que con él no puedo. Cuando ella llega en las mañanas, él la recibe muy enojado y a hasta la pega. Ella es muy buena y cariñosa, no creo que haya algún problema con ella, pero creo que él asocia que cuando ella llega mamá sale. No salgo por mucho tiempo seguido, llegan a ser dos horas a los más. Me parte el corazón tener que dejarlo. Me anda pidiendo la mano y asi caminamos por toda la casa y cuando se acerca la hora de la salida me pide brazos, y practicamente lo tengo que arrancar de mis brazos y llanto total. La niñera me dice que no llega a llorar mucho tiempo después de que me fuí, y que de ahi se le pasa y se pone a jugar, y efectivamente, cuando llego está feliz jugando. En las noches pasa lo mismo, si no voy yo y va el papá a atenderlo cuando despierta es escandolo total. Con el papá tiene muy buena relación, juegan y se divierten, pero yo siempre tengo que estar presente. Siempre ha sido muy apegado a mi, todo el mundo me dice que es un "mamón" y que tiene que aprender a estar sin la mamá. La verdad es que yo siempre lo he visto normal, pero tener que dejarlo me da mucha pena y siempre estoy ansiosa de volver a casa para estar con él, y hasta a veces dejo de hacer algunas cosas para estar más rápido con él ¿Qué opinan?