Estábamos su padre y yo dándole la cena y de pronto se ha girado a su padre y le dado un besito con más de beso que de lametón, que es lo que suele hacer.
Y después, me ha mirado, me ha cogido la cara con las manos y me lo ha hecho a mí. Y ha repetido a los dos.
En fin, yo con los ojos llenos de lágrimas y él tb.
Un día para recordar.
Ha seguido con un repertorio de mimos y caricias que nos ha dejado alucinados.
Supongo que ha oído que mañana es nuestro 6º aniv. de boda y este era su regalo. :wink:
Bueno, sólo quería compartirlo con vosotras.