- Jue, 26 Feb 2009, 14:19
#314392
Lo mismo le ha pasado hoy a mi enana, sólo se ha despertado una vez.
Se durmió a las 10 (ayer más tarde de lo habitual pues se durmió a las 7 de la tarde paseando) costó un rato grande de brazos, pero se durmió. La eché en su cuna, todas las noches las empieza en su cuna, y a las 4 (no sé si eran las 4 o las 2, ya la cojo tan dormida, que hay días que ni me entero de la hora) se despertó, la cogí, la metí en mi cama, y hasta las 7:15, más o menos, que se medio despertaba porque creo que tenía hambre. La he dado el bibe, un ratito en brazos, y se ha vuelto a dormir, hasta las 8:50, que la he encontrado sentada en la cama sonriendo ¡sin llorar!
No me quiero hacer ilusiones, pues seguro que ha sido una noche rara, y que volveremos a la rutina de 5-6 despertares nocturnos. Y cuando se despierta, la pongo el chupete, la cojo unos minutos y se vuelve a dormir, es soportable, lo malo es cuando se desvela y pasan horas enteras sin dormir (eso cada vez ocurre menos).
A veces soy pesimista, pero repasando lo que he escrito, la verdad es que no me puedo quejar. Además ya va aceptando un poco más su cuna, gracias a los consejos que me distéis cuando entré en el foro por primera vez. Es que es tan lento el proceso..., y cuando otras mamás te cuentan que sus bebés duermen toda la noche del tirón, te deprimes. Incluso una vecina que tiene un bebé de 2 meses, me contó que su hijo un día (no sé si más) durmió desde las 11 hasta las 9 de la mañana del tirón, y que le despertó para mamar, yo eso no lo veo normal, yo a mi hija con esa edad la habría despertado antes, a las 4 horas como mucho (recuerdo que me ponía el despertador, aunque nunca me hizo falta, ya se despertaba ella antes).
En fin, que no me quejaré, que leyendo en el foro veo que hay quien está peor que yo. Y no cambio a mi hija por nada, que aunque sea nerviosa y poco dormilona, es la mejor del mundo, y seguro que cuando menos lo piense ya no tenemos este problema porque ha crecido y daría lo que fuese por volver atrás aunque fuese sin dormir, y a sentir que sólo quiere dormir si está abrazadita a mí en la cama. Veo que poco a poco vamos consiguiendo cosas, lo importante es tener paciencia, mucha paciencia.
¡Madre mía qué discurso!