Hasta las cosas más tontas no quiere que las haga su padre: traerle un juguete, vestirle, lavarle las manos...
Ultimamente hemos vuelto al colecho (sólo el y yo) su padre duerme en otra habitación y ha empezado la guardería (a la que se ha adaptado perfectamente). Estos son los cambios más importantes.
¿Que podemos hacer? Su padre se siente un poco impotente ante la situación y yo no sé como actuar. A veces le decimos: pues no te viste mami lo va a hacer papi, pero se pone a llorar y claro al final le acabo vistiendo yo. No me parece bien dejarle llorar por una cosa así.
Teneís alguna idea?
Gracias