Después de encontrar este foro y leer que no estaba loca, lo empecé a tomar con filosofía.
Al cabo de unos meses eché al papá de la cama y mudé a las niñas conmigo. Desde entonces empezamos a dormir mejor. Los despertares no desaparecieron, pero al estar cerca y no tener que levantarme para arrullar a las niñas una y ota vez, todos pudimos descansar.
Al cabo del tiempo, los despertares disminuyeron, pero con 2 años y 7 meses seguían despertando por un biberón a las 3 de la mañana.
Me parecía excesivo, pero no dejé de hacerlo aúnque me recomendaron muchas veces que lo hiciera y las críticas por el colecho eran muchas.
De pronto un día ya no pidieron más leche. Así de sopetón empezaron a dormir de tirón casi todas las noches.
Hoy tienen 3 años. Todavía colechamos y papá sigue en el exilio. Siguen usando chupón y toman biberón aunque ya no usan pañal.
Si no han tenido un día muy agitado duermen tranquilas. Hablan mucho y a veces se quejan cuando una se sube sobre la otra, pero ya no despiertan.
Recién iniciaron la escuela y no he querido ponerlas en su habitación hasta que se adapten. Nos está costando trabajo porque parece que les hace falta su siesta, pero hemos estado probando y hoy se acostaron muy temprano, a ver si con eso ya no necesitan la siesta de la tarde.
Ahora no estoy del todo segura de querer al papá de regreso en la cama conmigo. He estado durmiendo muy bien y ¿saben? ronca mucho. No quisiera regresar a los despertares.
Un beso a todas las que me dieron sus consejos y apoyo. Ya les contaré si al pasar a sus camitas nos graduamos o tuvimos que repetir curso.