Las cadenas francesas de televisión no podrán editar, difundir o promover programas destinados «específicamente» a niños menores de tres años, en virtud de una decisión del Consejo Superior del Audiovisual (CSA) publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado, según informa Efe. Dicha medida entrará en vigor el próximo 1 de noviembre.
Así, los distribuidores de contenidos de televisión extranjeros creados expresamente para menores de tres años deberán comunicar a sus abonados de forma «legible y accesible» en la pantalla el siguiente mensaje del CSA: «Ver televisión puede frenar el desarrollo de niños menores de 3 años, aún cuando se trate de cadenas que se dirigen específicamente a ellos».
En los medios de comunicación audiovisuales, incluido internet, los distribuidores de programas para niños menores de preescolar deberán comunicar que ver a esa edad la tele puede acarrear «trastornos del desarrollo» como pasividad, retraso en el habla, agitación, problemas de sueño y concentración o dependencia de las pantallas. En el texto, el CSA recuerda que el Ministerio de Sanidad se ha pronunciado contra la difusión de cadenas de televisión específicas para menores de tres años y ha desaconsejado que éstos vean televisión, independientemente del tipo de programas que se emitan.