Cuando nosotros entramos acababan de cambiar a un bebe, y olía fatal. Resultado Nicolás ni quiso mamar, ni quiso que le revisara el pañal, ni nada. Se puso a llorar hasta que salimos. Al final opté por darle el pecho tranquilamente al aire libre en un banco en la calle y tan contentos. Pero y si hubiera sido la misma mujer pudorosa que las primeras semanas de lactancia?
Os lo cuento porque el tema me ha dejado cierto regustillo y porque casualidad hoy he encontrado este artículo:
http://www.bebesymas.com/2008/06/16-sal ... esconderse
Yo ayer sentí incómoda a la hora dar de mamar a mi bebe en esa salita, como si me escondiera o me escondieran. La idea me parece buena, de verdad, pero en ese centro comercial en concreto lo cierto es que salí disgustada. Jolin que no será por falta de espacio para crear al menos una sala de lactancia más espaciosa y al menos con el cambiador separado por una pared o algo asi....
"Gigoló" (vividora) de la maternidad
¡Va por Queli!
Yo de mayor quiero ser.... EMPODERANTE
¡Va por Lolilolo!