Parece que el objetivo más importante en el rato que se está en el parque es compartir el cubo y la pala. La secuencia habitual es esta: el niño o bebé está jugando tranquilamente en la arena con su cubito y su palita. Viene otro niño, y tras vacilar un poco le quita la pala. El propietario llora y quiere recuperar su pala, y entonces la madre/padre/abuela en cuestión al segundo grita "¡déjale la pala al niño, no seas egoísta!". Pero es que cuando el niño cuya pala ha tenido que ceder a regañadientes se va en busca de otra pala, la madre/padre/abuela en cuestión le suelta "¡no cojas esta pala que no es tuya, es del niño!".
Muy incoherente ¿no?