- Mar, 15 Abr 2008, 15:13
#252223
En los PosIt de este subforo también hay información interesante, por ejemplo:
1 Juegos y estímulos para cada etapa
1.1 Juegos y estímulos de carácter general
1.1.1 De 0 a 6 meses
• Agitar el sonajero cerca de él, desplazándolo, y hablarle desde lugares diferentes.
• El niño explora (del nacimiento al 4º mes) los objetos que le rodean.
• Hacia el tercer mes juega a agitar las manos ante sus ojos.
• Juego del “cucú-tras” (esconderse unos instantes).
• Ofrecer algo interesante para mirar (un móvil de colores vistosos), para tocar (un muñeco de peluche o un sonajero) o para escuchar (una radio).
• Demostrar con caricias que os encanta su cuerpecito (desarrolla la seguridad y la confianza).
• Caminar por la habitación con el bebé en brazos.
• Para de caminar, mírale a los ojos, sonríe y frota su nariz contra la tuya.
• Vuelve a caminar y para de nuevo. Repite varias veces.
• Sujetar un pañuelo de colores vivos delante de él. Muévelo lentamente mientras las sobre los colores del pañuelo. Muévelo hacia otro lado (Jugar a menudo).
• Sonajero. Cantar una canción. Moverlo hacia un lado y hacia otro. Seguir moviéndolo por diferentes partes de la habitación.
• Dar vueltas con ella. Sostenlo en brazos mientras giras en círculo. De espalda. Dar vueltas.
• Su cara mira a la tuya. Dar vueltas.
• Habla de todo lo que estás haciendo.
• Cántale canciones a lo largo del día.
• Variar de vez en cuando los tonos de voz.
• Coge varios juguetes de colores vistosos y muévelos lentamente uno por uno delante de él.
• Coge sus manos y hazlas batir con suavidad delante de ella.
• Siéntate delante de un espejo. Di: ¿Quién es ese bebé? ¿Dónde está el pie del bebé? Saluda con el pie del bebé y di: “hola, pie”. Sigue con el resto de las partes del cuerpo.
• Utilizando el dedo índice y el corazón, toca diferentes partes de su cuerpo. Nombra cada parte al tocarla.
1.1.2 De 6 a 9 meses.
• Rodar su cuerpo en la cama, despacio. Empujarlo despacio para que se caiga de espaldas en la cama cuando esté sentado.
• Ofrecerle objetos para que gatee hacia ellos.
• Animarle a ponerse de pie y a sentarse sobre el regazo, sujetándole por las axilas.
• Hay que hablarle mucho, explicándole las cosas. Cada vez que emita alguna sílaba, imitadle para que la repita de nuevo.
• Cambiar con frecuencia el campo de visión del niño. Por ejemplo, colocarle delante de una ventana.
• Escuchar música clásica y canciones infantiles.
• Ayudar a reconocer los diferentes ruidos y sonidos (teléfono, timbre, radio, etc).
• Que palpe los detalles de los objetos.
• Enseñar a diferenciar el frío del calor en objetos diversos.
• Si la temperatura lo permite, que ande descalzo.
• Que huela diferentes perfumes.
• Llamarle siempre por su nombre.
• Poner diferentes objetos en una caja y jugar a sacarlos.
• Siempre que vaya a hacer algo peligroso, hay que decirle “no” y al mismo tiempo se niega con la cabeza.
• Hay que dejar 4 ó 5 juguetes alrededor del bebé para que los explore, cambiándolos con frecuencia.
• Utilizar la alfombra de juegos.
• Utilizar la trona para comer.
• Es necesario comunicarse mucho con él: cuentos, canciones, música, juegos, gimnasia.
• Cuando comience a gatear, ofrecerle algún objeto que le llame la atención y lo obligue a desplazarse.
• Limitar a 30 minutos la estancia en el “parque”. Es importante tenerlo cerca, hablarle o cantar, e incitarle a jugar.
• Enseñar a gatear con distintas dificultades: entre obstáculos, subiendo una escalera, etc.
• Jugar a perseguirle a gatas.
• Tumbado boca arriba, cogerle de las manos y levantarle poco a poco hasta dejarle sentado.
• Enseñar un juguete, por encima de la cuna, para incitarle a incorporarse cogiéndose de los barrotes.
• Desde la postura de gateo, delante de una silla o una cama, incitarle a levantarse, mostrándole un juguete y animándole cuando lo vaya consiguiendo.
• Enseñar a mantenerse sobre una sola pierna.
• Colocarle de pie, frente a la cama (como punto de apoyo), e incitarle a dar patadas a una pelota.
• Ofrecer diversos objetos, como un cubo, un dado, un plato de plástico, cubiertos, etc.
• Colocar un juguete dentro de un recipiente e incitarle a sacarlo.
• Fomentar las conductas de imitación.
• Imitación de tareas (dar de comer a su muñeco, vestirlo, acostarlo, etc).
• Gatear sobre una persona. Échate en el suelo y coloca al niño en un lado, de modo que tenga las rodillas en el suelo. Coloca algún juguete al otro lado, de modo que el niño intente cogerlo.
• Gatear en cabestrillo.
• Persecución a gatas. Hacia el décimo mes, el niño habrá aprendido a gatear hacia delante y hacia atrás rápidamente.
• Gatear entre obstáculos.
• Para aprender a gatear: por al niño boca abajo y sitúa un juguete a 20 o 30 cm de distancia a un lado, para que intente cogerlo.
• Poner al niño boca abajo y ofrecerle un juguete a unos 15 cm al frente y hacia arriba, de modo que intente cogerlo.
• Ofrecer al niño un objeto alargado en diversas posiciones (una cuchara, por ejemplo): horizontal, vertical e inclinada
1.1.3 De 9 a 12 meses
• “Toma y dame” con objetos de su entorno.
• Al bañarle, señalar y nombrar las partes de su cuerpo para que las aprenda.
• Gatear con ella jugando al “corre que te pillo”
• Envolver un juguete en una servilleta y animarle a desenvolverlo.
• Poner música y bailar con él.
• Cuentos con dibujos grandes, para que relacione las imágenes con los objetos de su realidad cotidiana.
• Lanzar objetos al aire para que los siga con la mirada.
• Objetos para apilar (cajas de cartón, cubos, etc)
• Hacer teatro con sus muñecos, moviéndolos y poniéndoles voz y sentimientos.
• Mirar libros y cuentos.
• Jugar a encontrar objetos, citando los nombres de cada cosa.
• Enseñar a contestar con gestos (aplaudir, sonreir, etc).
• Llevarle con frecuencia a la calle.
• Jugar a meter unos objetos dentro de otros.
1.1.4 De 12 a 18 meses.
• Es el momento de enseñarle a nadar.
• Pedirle que haga gestos y muecas ante un espejo.
• Si ya sabe apilar dos cubos, enseñarle a hacer torres más altas, de tres alturas.
• Con diferentes canciones, jugar a que se señale la boca, los ojos, la nariz, etc.
• Cuando salga de paseo, decidle los nombres de todo lo que le llame la atención e incitadle a repetirlos.
• Mientras explora la casa, enseñadle el nombre de las cosas.
• Cuando camine solo, llamadle desde atrás para que practique el giro.
• Encestar pelotas en una caja.
• Enderezar fotos, mostrándolas primero boca abajo y luego colocándolas en la posición correcta.
• Impulsar cochecitos para hacerlos rodar por el suelo.
• Sentados uno frente al otro, pasarse una pelota.
• Participación en las tareas de la casa (por ejemplo: pedirle que lleve el pan a la mesa)
• Jugar a imitar, incluidos los animales.
• Cartulina y plastilina, para moldear varias formas.
• Que ande transportando cosas, y arrastrando un juguete.
• Colocar objetos pequeños sobre otros más grandes.
• Encajar objetos de distinto tamaño uno dentro de otro.
• Colocar objetos en fila.
• Movimientos de coordinación: echar monedas en una hucha, poner y quitar el tapón de una botella, abrir y cerrar cajas, deslizar anillas por una varilla.
• Jugar a cambiar cosas (“yo te doy, tú me das”).
• Ayudarle a caminar a menudo sin decirle nada para que se concentre en mayor grado y siempre animándole al término del esfuerzo.
• Recortar y pegar imágenes, con tijeras para niños.
• Utilizar puzzles y juegos de ensamblaje.
• Enseñarle a utilizar correctamente el tenedor y la cuchara.
• Sacar juguetes de debajo de un mueble utilizando una regla o una vara.
• Jugar con un recipiente lleno de agua, en la que algunos objetos floten y otros se hundan, y con vasos de plástico de diferentes tamaños.
• Repetir a menudo el nombre de los vestidos, partes del cuerpo, alimentos, cosas de la casa, juguetes, etc.
• Nombrar los objetos colocados encima de una mesa o en el suelo, señalándolos mientras se pronuncian.
Palabras sugeridas para objetos cotidianos:
Cara: boca, ojos, nariz...
Cuerpo: brazos, manos, piernas, etc.
Ropa: camiseta, braguita, calcetines, falda, etc.
Casa: puerta, mesa, silla, etc.
Comida: agua, leche, galletas, pescado, etc.
Calle: coche, casa, autobús, árbol, etc.
• Aprovechar situaciones en la casa o en la calle para explicarle lo que sucede a su alrededor, con frases cortas compuestas de palabras sencillas.
• A partir de 1 año hay que introducir los juegos de habilidad y equilibrio: ensartar unas anillas en un palo, bicicleta o patines, juegos de magia con las manos.
1.1.5 A los 15 meses
• Hablar al bebé y presentarle libros con frecuencia, un poco todos los días.
• Poner a su disposición juguetes que se arrastran.
• Jugar a la pelota.
• Darle papel y un lápiz ancho y corto.
• Permitirle que haga cosas por sí solo (comer, vestirse, desvestirse, etc).
1.1.6 De 18 a 24 meses
• Dar patadas a una pelota y perseguirla después de botarla.
• Abrir y cerrar botes de rosca.
• A partir de los 21 meses: Hacia los 24 meses: pedalear en un triciclo, voleyball con un globo, tenis con una pelota inflable, etc.
• Piezas de plástico que encajen unas dentro de otras. Preferiblemente piezas cilíndricas.
• Encestar pelotas en una caja.
• Explicarle lo que sucede en la casa o en la calle, con frases sencillas.
• Jugar a intercambiar cosas (“yo te doy, tu me das”).
• Colocar objetos en fila.
• Clasificar y ordenar objetos según el tamaño.
• Participación en tareas, por ejemplo: pedir que lleve el pan a la mesa.
• Repetirle a menudo el nombre de ropas, cosas de la casa, juguetes, cosas que vaya viendo en la calle, etc.
• Utilizar puzzles sencillos.
• Jugar a imitar.
• Al construir torres se le dice que está construyendo una casa o una Iglesia, o un tren (construcción horizontal). También se puede explicar fin y medio.
• Clasificar según el color: se comienza con dos bloques amarillos y dos rojos. Enseñadle a separarlos en grupos de colores. Cuando sepa hacer esto, se pasa a tres bloques amarillos y tres rojos.
• Aprender los colores. Se pueden usar cartulinas de colores para enseñar los colores, a partir de los 18 meses aproximadamente. El amarillo es un buen punto de partida y se deberán enseñar los colores de uno en uno, normalmente antes de que se haya logrado alguna clasificación por color. Hay que decirle “esto es amarillo”. A continuación pedid que encuentre objetos de un color parecido entre las piezas o entre lápices de colores, o en cualquier otro sitio de la habitación (pueden ser necesarios un par de minutos al día durante 3 ó 4 semanas para aprender un solo color).
• Contar (al principio sólo hasta 3. Cuando haya aprendido a contar hasta 3, se continúa hasta 5, y así sucesivamente)
• Usando objetos reales similares (cucharas, piezas de plástico, coches en la calle, etc).
• Escalones al subir o bajar las escaleras, o simplemente decir “un, dos, tres”, antes de entrar en la casa, etc).
• Contar dedos de la mano.
• Utilizando canciones que incluyan números.
1.1.7 De 2 a 3 años
• Hay que procurar no imitar al niño repitiendo sus palabras de manera deformada.
• Poner a su disposición libros con imágenes, música infantil, espacio para pintar, etc. A esta edad (2 años aproximadamente) hay que empezar con los juegos de construcción, que son muy útiles para desarrollar todas las facultades mentales. Los más conocidos son los mecanos y legos. También son indicados los que implican construir o ensamblar piezas: circuitos para un tren, recortables de papel, plastilina, juegos de herramientas, confección de vestidos o adornos (cuentas para hacer un collar o un cinturón, etc), etc.
• Aprender canciones infantiles y juegos de palabras.
• Utilizar juegos que permitan ordenar el material de forma lógica para memorizarlo (formar una palabra con las iniciales de varios nombres).
• Conversar frecuentemente sobre las experiencias vividas, por ejemplo, a partir de fotografías.
• Juegos con agua. Enseñar a llenar un recipiente grande con otros más pequeños.
• Darle calcetines y pedirle que los agrupe por parejas, o colocar en un frutero distintas variedades de frutas y pedirle que las separe unas de otras.
• Se puede comenzar también con los juegos simbólicos: reproducir el mundo de los adultos y sus actitudes. Utilizan objetos reales (poner el chupete a papá, ayudar a lavar los platos a mamá, etc). A partir de los 4-5 años, además de copiar la realidad, inventan una historia. A partir de los 6 años, la historia que el niño inventa es una historia real.
• Alinear tres o cuatro objetos al lado de la pared. Pedirle que cierre los ojos y esconded uno. Preguntadle: ¿Qué falta?
• Veo, veo. Hay que escoger objetos concretos de los que estemos seguros de que conoce la palabra.
• Con los ojos cerrados reproducir el sonido de un objeto que el niño tenga cerca: las llaves, un despertador, etc. Se le pide el nombre del objeto.
• Repetir el mismo ejercicio pero con objetos que pueda oler.
• Repetir el mismo ejercicio, pero con objetos que pueda tocar.
• De vez en cuando indicarle nombres y palabras relacionadas: cuadrado, rectángulo, triángulo, etc.
• Pedirle que busque formas cuadradas o que se parezcan a los cuadrados y también formas redondas.
• Clasificar y emparejar: calcetines, cubiertos, etc.
• Ordenar juguetes: las muñecas aquí, los coches allí.
• Parejas de imágenes.
• Dominó con imágenes.
• Clasificar según la forma: se ponen dos piezas de cada forma en un pequeño montón encima de la mesa. Hay que empezar con 2 y aumentar a 3 y 4. Hay que asegurarse que los colores son los mismos para todos los tamaños. Esta actividad se puede extender a clasificar tazas y platillos, cucharas y tenedores, etc.
• Utilizar un ábaco que tenga bandas gruesas. Se comienza contando hasta 3, luego hasta 5 y, por último, hasta diez.
• Contar objetos: dedos, lápices, muñecos, etc. (primero 3, luego hasta 5, y posteriormente hasta 10).
• Enseñarle a coger el lápiz (las habilidades motrices permiten esto alrededor de los 2 años y medio) y que comience a trazar líneas verticales, horizontales (poco a poco).
• Actividades con plastilina.
• Palabras con plastilina.
• Preguntarle los nombres de las cosas de la casa.
• Construcción de torres con bloques de madera.
• Preguntarle a menudo algunos colores.
• Cortar con tijeras. A partir de los 3 años, aproximadamente, es niño es capaz de hacer cortes con tijeras especiales para niños (sin punta). Hay que ayudarle a recortar: todavía no sabrá recortar formas redondas.
• Después de leer un cuento, pedirle que represente el papel de un personaje.
• Pedirle que baile canciones infantiles.
• Dibujos en los que algún elemento esté colocado al revés. Preguntar ¿Qué está mal?
• Juegos interpretativos: que interprete algún personaje.
• Fabricar álbumes con recortables.
• Plantar semillas.
• Aviones de papel.
• Clasificar tenedores y cucharas (tres de cada).
• Que ayude a poner la mesa.
1.1.8 De 3 a 4 años.
• Se pueden comenzar los juegos de regla: juegos de mesa (cartas, oca, parchís) y de competición (actividades deportivas que enfrentan a dos grupos). Estos juegos tienen una importante función en el desarrollo de las habilidades sociales y la capacidad para negociar, ya que desarrollan el sentimiento de la vinculación y pertenencia a un determinado grupo social.
• Para una sesión de aprendizaje es conveniente sentarse en una mesa grande de cara a la pared, y dividir las actividades más o menos del siguiente modo:
o 5 minutos: Dibujar/copiar letras
o 5 minutos: aprendizaje de colores.
o 5 minutos: contar
o 5 minutos: significados de palabras.
o 5 minutos: cuento
• Se puede comenzar el aprendizaje de la longitud (largo, más largo, lo más largo) (corto, más corto, lo más corto) utilizando pajitas, por ejemplo.
• Comenzar con el concepto de peso (por ejemplo, utilizando patatas)
• Comenzar con el concepto de volumen con tres vasos de agua llenados con distintos volúmenes.
• Utilizar tarjetas con números. En una cartulina dibujar con números grandes del 1 al 20 y encerrar en un círculo los pares, y después los impares.
• Una de las mejores formas de enseñar a sumar es utilizando pequeños bloques de madera (sumar es ir hacia arriba y restar ir hacia abajo).
• Contar con monedas.
• A los tres años un niño necesita que la historia que le lean tenga tres elementos: una página ilustrada para comentarla, una caracterización viva, mucha acción y un poco de misterio. Muchos cuentos de hadas contienen estos elementos. Hay que interpretarle el papel del gigante o de la bruja.
• Bolsa de sorpresas. Ponemos diversos objetos dentro de una bolsa. El niño debe introducir una mano y debe identificarlos con el tacto.
• Juguete sobre la mesa. Cubierto con un paño, para que deje traslucir, más o menos, la silueta. Averiguar su nombre.
• Ruidos. ¿Qué ruido produces cuando comes algo que te gusta mucho? ¿Cuándo estornudas, cuando soplas fuerte por la boca, el viento, un coche, un tren, etc?
• Sonidos. Imitar el ruido de una abeja (zzzzzz), de un neumático que se desinfla (sssss...), de un coche, etc.
• Cumplir órdenes. Sal de ahí, dejando la mesa a tu derecha, sigue adelante, da una vuelta a la silla; detente de pie, ante el armario, etc.
• Tres objetos. Por ejemplo, un plátano, una manzana y una naranja. Colócalos de modo que la manzana tenga a su derecha el plátano y que la naranja tenga la manzana también a su derecha.
• Pasado presente, futuro. ¿Qué hiciste ayer? ¿A quién viste? ¿Qué vas a hacer el próximo domingo?
• ¿Qué hago durante el día? Me levanto...
• Ritmos. La letra M representa aplaudir. La P, golpear el suelo con los pies. Ejemplos: MMP,PPM,MPM,PPP, etc.
• Transcripción de un ritmo. Golpes fuertes en la mesa: el niño dibuja una espiral; golpes flojos, un punto.
• Palmear palabras. Decir palabras destacando bien cada una de sus sílabas, acompañando cada sílaba con una palmada.
• Completar series. Desayunar, comer, merendar...¿Qué palabra seguiría? (Noche,cena). Dedo, mano, brazo...
• Clasificar palabras en grupos: Lluvia, pájaro, nieve, perro, viento, gato, truenos, etc.
• Terminar frases: con los ojos veo, con la boca...; el agua del mar es salada, el azúcar es...; el pájaro vuela, el pez...
• Causa-efecto: terminar frases como: ya que he pasado horas sin comer, ahora tengo...; He salido sin paraguas, y, como llueve...
• Aprender y recitar poesías, comenzando por dos versos, aumentando cada día hasta completar. También canciones.
• El dibujo escondido. Se le enseña un dibujo y el niño lo observa. Luego se le retira y se le pide que recuerde los detalles.
• Órdenes con gestos. Dar órdenes para que las cumpla, sólo con gestos.
• Planteamiento de problemas: haced cosas que el niño sepa que están mal: por ejemplo poner los zapatos en la cabeza, los guantes en los pies, los calcetines en las manos.
1.1.9 Aspectos a tener en cuenta
1.1.9.1 Motivación
En líneas generales, para lograr una adecuada motivación hay que presentarle los estímulos que le son útiles de una forma llamativa, interesante y oportuna, y para ello es necesario:
a) Que sean perceptibles para el niño.
b) Que llamen su atención y le diviertan.
c) Que mantengan su interés.
d) Que el niño haya sido preparado para el estímulo y éste sea adecuado.
e) Que afecten a su interés en ese momento.
Si una actividad no genera interés en el niño, el peor error es intentar imponérsela. Esto garantizará que probablemente nunca llegue a gustarle ni sea bueno en ella. Si algo así sucede, es mejor retirar transitoriamente la actividad, y continuar con otras que si le interesen.
En niño sólo considera importante aquello que realmente le interesa.
1.1.9.2 Ritmo de progreso
Hay que tener en cuenta que siempre hay variaciones individuales en el proceso de desarrollo cerebral e intelectual. Por otro lado, es absolutamente normal que el niño no progrese de forma constante y lineal. A etapas de aprendizaje y desarrollo le siguen períodos en los que los avances son más lentos (o parecen serlo) o hay un relativo estancamiento, para después volver a una fase de progreso rápido. Por ello, hay que adaptar el ritmo de enseñanza a estas pautas.
Es especialmente importante que los padres eviten frustrarse ante las etapas de estancamiento, manifestando desagrado o decepción al niño. De hacerlo así, sólo lograrán angustiarle, desmotivarlo más en las actividades en las que está estancado y prolongar esa fase, e incluso hacerle aborrecer esa actividad. La actitud correcta consiste en aguardar cierto tiempo y, de ser necesario, volver a motivarle –sin presionar- en relación a la actividad en la que esté estancado.