Durante varias semanas ha estado durmiendo 4 ó 5 horas seguidas, y despertándose tan solo una ó 2 veces por la noche, cuando lo normal era que no aguantara ni 3 horas seguidas. Eso sí, como todo no puede ser perfecto, lo malo era que antes de las 11 ó 12 de la noche no conseguíamos que se durmiera, y aunque él estaba feliz, y sólo quería jugar, pues renegábamos un poco. Algún día ya se nos acababan todos los recursos para conseguir que se durmiera, pero a base de sacos de paciencia terminábamos consiguiéndolo.
Pero ayer ha sido algo distinto, y ojalá que está noche se repita, porque yo no las tengo todas conmigo. Después de cenar se me acurrucó en la teta y me hizo señales para que subiéramos a la cama. Me tumbé en mi cama con él, todavía pegado a la tetilla, y al poco se quedó dormido. Le pasé a la cuna, y así aguantó desde las 9 hasta las 2:30. Yo alucinaba. Le metí conmigo en la cama, y a las 4:30 volví a pasarlo a la cuna, y allí ha estado hasta más de las 8:30.
Así que como veis se nota la mejoría. Lo malo es que al dormir más reclama menos teta, y yo de momento no se la quiero quitar, pero en fin, dejaremos que pase el tiempo para ver como sigue evolucionando la cosa, porque desde luego que lo que tampoco voy a hacer es despertarle para darle la teta.