Bueno, estamos en un bache, que es cosa de dos, mi socio y yo.
No acostumbro a explicar tristezas aquí, pero hoy estoy tan baja de moral que lo voy a hacer, en plan exorcismo, para luego reflotar y esta tarde estar mejor.
Un fin de semana negro. El jueves mi socio me dijo que "algo no va bien" pero claro, como su nivel de expresión verbal de los sentimientos es tan básico, no me explicó nada más. Ya me dirás. Estuve rato preguntando, dándole vueltas, buscando. Y sólo me pudo decir "ya se me pasará".
Ya sé qué puede ser, claro, la vida nos arrastra, tenemos mil historias en la cabeza, llegamos tarde, cansados, mientras yo duermo a Jan (ahora estamos cada día 1 horita dando volteretas en la cama), yo bajo y él ya está en el quinto sueño, y yo todavía tengo que cenar (él cena más bien poco y mal) y hacer la comida para el día siguiente.
Tenemos poco tiempo para disfrutar con Jan los tres juntos. El fin de semana se hace corto (bueno este pasado eterno ). Encima con familia, que la verdad a veces a mí me sobra, querría estar más con él y Jan pero a él parece que le apetece más lo contrario (eso sí, con SU familia, porque con mis amigos y mi familia.....).
No sé, habrá que para el mundo y hablarlo, no sé como. Yo le dije, lo que se tenga que hacer lo hago, vamos a intentarlo juntos, pero él que no, que no sabía qué pedirme . Así que hecha una mierda he pasado el fin de semana, llorera va llorera viene, es que estoy un poquillo superada. Además los nervios se han traducido esta mañana en una maravillosa contractura en las cervicales, que me va de maravilla para enseñar mi fantástico cuello de cisne, eso sí.
No quiero que esto se vaya al garete. Veremos como lo enfoco, espero que todo vaya bien.
Lo que decís much@s, si habéis llegado hasta aquí GRACIAS, el sábado quedé con unas amigas pero como estuve persiguiéndo a Jan detrás de palomas, perros y barras de pan, no podía ni siquiera hilar una frase.
En fin, ahora el día sólo puede mejorar.