- Mar, 23 Oct 2007, 17:01
#199861
Hoy he estado haciendo limpieza en un armario y además de mucho polvo 
, he removido y han salido demonios del pasado. He encontrado un diario de cuando yo era adolescente. He mirado, releído algunas anécdotas, he buscado en mi interior alguna muesca de aquellos sentimientos juveniles para poder entender mejor a mi hijo. Ha servido de gran ayuda pero al llegar a un día en concreto me he quedado patidifusa. Voy a copiaros íntegramente el texto en cuestión pero antes tengo que aclararos algunas cosas para que podáis entenderlo bien.
Yo he estudiado danza clásica en el Conservatorio de Sevilla. Los cursos se van pasando como en el colegio: tu profesor/a te pone la nota en los trimestres y al final del curso ella decide si promocionas o no. En 4º y 7º (último curso cuando yo estudié) teníamos que pasar por Tribunal, esto es, además de tu propio profesor/a tienes a dos más para examinarte. Entras tú sola en clase, haces los ejercicios pertinentes y ellos deciden si apruebas o repites curso. Pues bien, este día que os voy a escribir fue el día que me dieron las notas de junio de 4º curso. Había aprobado las dos evaluaciones con bien por lo que yo iba más o menos tranquila al examen…
Pongo en cursiva las aclaraciones. Perdonad el lenguaje pero quería ponerlo tal y como está escrito…
24/06/92
Hoy he ido a recoger las notas y la cara de Marisol (mi profesora) me lo ha dicho todo. Esto es una puta mierda, es injusto y todo el mundo lo sabe. Le he pedido explicaciones, y me las ha dado, y tanto que me las ha dado. Me ha dicho que ella quería aprobarme, que ha sido cosa de los otros dos profesores. Me ha dicho que le han llamado la atención porque estoy gorda y que con ese culo no me podían pasar a 5º, que me iba a pesar demasiado con las puntas. Claro así no me lo ha dicho ella, pero yo sé que es lo que me quería decir. No sé qué voy a hacer, aparte de ponerme a régimen, claro. Ya le he dicho a mi madre que este verano me tiene que apuntar a clases, me da igual lo que cuesten y me he propuesto perder 7 u 8 kilos hasta septiembre. Después de las clases me vendré corriendo a mi casa y voy a ir a la farmacia para comprar algunos laxantes de los que me dijo María. La putada es no poder vomitar y que esta mujer (mi madre, claro está) tiene que estar siempre ahí pendiente de todo lo que hago. Le he dicho a Jose (el chico con el que salía) que si quiere que nos veamos tiene que ser por las noches cuando salga de mis clases […] No sé qué voy a hacer, este cuerpo tiene que cambiar y tengo que conseguirlo como sea. A ver qué coño me invento para perder culo y caderas, ya no sé cuántas lanas ponerme en las clases (me ponía unas lanas y unos plásticos encima para sudar más). Y va mi madre y me dice que no me preocupe, que seguro que en septiembre apruebo…y una mierda, que me han suspendido por gorda, mamá, entérate, que mis ejercicios estaban bien, que mis giros son buenos, que tengo potencia en los saltos y mis puntas van bien…pero soy una vaca con mayllot.
No puedo más, esto es una mierda, nadie me entiende, nadie sabe lo que significa el ballet para mí, nadie…[…]
Bueno, creo que con esto basta, chicas, me cuesta mucho escribirlo. Creo que aquí empezó todo, aquí empezaron mis problemas con la comida. Al final adelgacé, claro que adelgacé…pero no aprobé tampoco el septiembre y tuve que repetir curso. Me quedé en plena adolescencia con 50 kilos o menos (serían menos porque 50 era mi límite, el que yo me ponía para decirme a mí misma vaca). Me pegué así muchos años…más de los necesarios. Nunca me ha visto un especialista, ni ningún médico. Tuve a mi madre muchos años desconcertada, pero por aquel entonces no había tantas noticias como ahora ni tanta información acerca de la anorexia y la bulimia. Terminé mis estudios de ballet y me alegro por ello, bailando he sido la persona más feliz de la Tierra, pero también se llevó la danza un trozo grande de mí misma irrecuperable, mi autoestima. La dejó dañada, mutada…y de eso cuesta recuperarse.
No sé cuándo terminó todo aquello. Sé que cuando cambié de profesor en 6º curso la cosa mejoró notablemente, él me hizo quererme un poquito más a mí misma y me dio muchas oportunidades de bailar y disfrutar. Terminé ballet en 1º de Magisterio pero seguí bailando hasta los 20 años. Cuando conocí a Raúl a los pocos meses dejé el ballet, sabía que con él no podía seguir matándome por dentro…
Gracias si habéis leído hasta aquí, hoy me he desnudado más que ningún día y ahora mismo tengo que irme al baño a limpiar estas lágrimas, a ver si va a venir alguien…
Os quiero.
, he removido y han salido demonios del pasado. He encontrado un diario de cuando yo era adolescente. He mirado, releído algunas anécdotas, he buscado en mi interior alguna muesca de aquellos sentimientos juveniles para poder entender mejor a mi hijo. Ha servido de gran ayuda pero al llegar a un día en concreto me he quedado patidifusa. Voy a copiaros íntegramente el texto en cuestión pero antes tengo que aclararos algunas cosas para que podáis entenderlo bien.
Yo he estudiado danza clásica en el Conservatorio de Sevilla. Los cursos se van pasando como en el colegio: tu profesor/a te pone la nota en los trimestres y al final del curso ella decide si promocionas o no. En 4º y 7º (último curso cuando yo estudié) teníamos que pasar por Tribunal, esto es, además de tu propio profesor/a tienes a dos más para examinarte. Entras tú sola en clase, haces los ejercicios pertinentes y ellos deciden si apruebas o repites curso. Pues bien, este día que os voy a escribir fue el día que me dieron las notas de junio de 4º curso. Había aprobado las dos evaluaciones con bien por lo que yo iba más o menos tranquila al examen…
Pongo en cursiva las aclaraciones. Perdonad el lenguaje pero quería ponerlo tal y como está escrito…
24/06/92
Hoy he ido a recoger las notas y la cara de Marisol (mi profesora) me lo ha dicho todo. Esto es una puta mierda, es injusto y todo el mundo lo sabe. Le he pedido explicaciones, y me las ha dado, y tanto que me las ha dado. Me ha dicho que ella quería aprobarme, que ha sido cosa de los otros dos profesores. Me ha dicho que le han llamado la atención porque estoy gorda y que con ese culo no me podían pasar a 5º, que me iba a pesar demasiado con las puntas. Claro así no me lo ha dicho ella, pero yo sé que es lo que me quería decir. No sé qué voy a hacer, aparte de ponerme a régimen, claro. Ya le he dicho a mi madre que este verano me tiene que apuntar a clases, me da igual lo que cuesten y me he propuesto perder 7 u 8 kilos hasta septiembre. Después de las clases me vendré corriendo a mi casa y voy a ir a la farmacia para comprar algunos laxantes de los que me dijo María. La putada es no poder vomitar y que esta mujer (mi madre, claro está) tiene que estar siempre ahí pendiente de todo lo que hago. Le he dicho a Jose (el chico con el que salía) que si quiere que nos veamos tiene que ser por las noches cuando salga de mis clases […] No sé qué voy a hacer, este cuerpo tiene que cambiar y tengo que conseguirlo como sea. A ver qué coño me invento para perder culo y caderas, ya no sé cuántas lanas ponerme en las clases (me ponía unas lanas y unos plásticos encima para sudar más). Y va mi madre y me dice que no me preocupe, que seguro que en septiembre apruebo…y una mierda, que me han suspendido por gorda, mamá, entérate, que mis ejercicios estaban bien, que mis giros son buenos, que tengo potencia en los saltos y mis puntas van bien…pero soy una vaca con mayllot.
No puedo más, esto es una mierda, nadie me entiende, nadie sabe lo que significa el ballet para mí, nadie…[…]
Bueno, creo que con esto basta, chicas, me cuesta mucho escribirlo. Creo que aquí empezó todo, aquí empezaron mis problemas con la comida. Al final adelgacé, claro que adelgacé…pero no aprobé tampoco el septiembre y tuve que repetir curso. Me quedé en plena adolescencia con 50 kilos o menos (serían menos porque 50 era mi límite, el que yo me ponía para decirme a mí misma vaca). Me pegué así muchos años…más de los necesarios. Nunca me ha visto un especialista, ni ningún médico. Tuve a mi madre muchos años desconcertada, pero por aquel entonces no había tantas noticias como ahora ni tanta información acerca de la anorexia y la bulimia. Terminé mis estudios de ballet y me alegro por ello, bailando he sido la persona más feliz de la Tierra, pero también se llevó la danza un trozo grande de mí misma irrecuperable, mi autoestima. La dejó dañada, mutada…y de eso cuesta recuperarse.
No sé cuándo terminó todo aquello. Sé que cuando cambié de profesor en 6º curso la cosa mejoró notablemente, él me hizo quererme un poquito más a mí misma y me dio muchas oportunidades de bailar y disfrutar. Terminé ballet en 1º de Magisterio pero seguí bailando hasta los 20 años. Cuando conocí a Raúl a los pocos meses dejé el ballet, sabía que con él no podía seguir matándome por dentro…
Gracias si habéis leído hasta aquí, hoy me he desnudado más que ningún día y ahora mismo tengo que irme al baño a limpiar estas lágrimas, a ver si va a venir alguien…
Os quiero.
QUÉ SUERTE HAY QUE TENER AL NACER.- (SKA-P)
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