- Jue, 11 Oct 2007, 13:27
#194292
JAMAS ME HUBIERA HECHO LAS PRUEBAS DE ADN Y DESDE LUEGO NO PERMITIRÍA, perdón estoy gritando, que se las hicieran a MI HIJO, sin perdón estoy gritando.
Obligada por un Juez? No se siempre cabe la fuga.
Desde el mismísimo instante en que me entregaron a Pablo, dos horas eternas despues de su nacimiento por cesaréa, no tengo duda alguna de a quién amo y de quién es el acreedor con todas las de la ley y todas las del corazón de dicho amor, será que la sangre tratándose de él no me tira nada.
Por cierto, Pablo es rubio rubio y en nuestra familia hay uno o ninguno.
Que alguien viene a decirme que el bebé que creció en mi seno, piel de mi piel, sangre de mi sangre, no es Pablo sino ¿Alberto?, bueno, pues en ese caso si sus padres le quieren como yo al suyo, con ellos debería quedarse, si no le quieren que me lo den, yo llegaría a amarle seguramente pero
Pablo se queda dónde está, con su madre, no hay intercambio posible.
Desde luego tendrían toda mi colaboración para contar con mis antecedentes genéticos y yo, por las buenas o las malas, conseguría los suyos si de ello depende la salud de mi niño.
Edito para aclarar que no se lo ocultaría, los profesionales me indicarían cuándo y cómo decírselo, en su caso él tomaría las decisiones oportunas sobre su familia biológica al igual que sucede en una adopción.
Última edición por MAMA TERESA el Jue, 11 Oct 2007, 13:33, editado 1 vez en total