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- Lun, 17 Sep 2007, 18:28 #182579 Tengo un bebe de 7 meses que grita muchisimo,generalmente cuando se enfada ó no consigue lo quiere.
El problema principal es que se provoca una laringitis bastante grande,y se irrita la garganta del esfuerzo, en la guarderia le llaman "pavarotti" y dicen que despierta y revoluciona aotros bebes.

¿Sabeis como puedo hecerle entender que no se debe gritar? Es muy pequeño, no se lo puedo explicar.

- Mar, 18 Sep 2007, 11:39 #182931 Hola
Yo tengo en casa a Placido Domingo, jejeje
Joel también tiene 7 meses y lleva como unas dos semanas gritando a todo trapo. Las primeras veces casi me da un infarto porque a lo mejor él estaba en el parque y yo había ido al baño o al dormitorio y salía corriendo como una loca pensando que le había pasado algo, con decirte que una de las veces por poco me mato del tortazo que me dí con una puerta ... y cuando llego me mira y se parte de risa el tío
En fin que si se nos une otra montamos los 3 tenores 2.
Saludos

- Mar, 18 Sep 2007, 11:45 #182934 es normal que los bebes de esa edad chillen. y a medida que se acercan a los 12 meses, mas aun. ellos no saben hablar y es su modo de protestar. a veces tambien expresan a gritos su alegria, solo que esto no suele ser motivo de queja de las madres ( ). ellos carecen de la capacidad de controlar el tono de voz. pero ademas hay una excitación añadida: si mis gritos hacen saltar a mama, se vuelven mucho nas interesantes. (hace tiempo lei una frase: a los niños les encantan los juguetes en los que apretando una tecla suena un chillido: no se convierta usted en el juguete preferido de sus hijos).

esto es un bebe normal de 6 a 12 meses (podeis leer el articulo completo en el post it educar con cariño: se titula colera y frustración):

Debe detener al bebé e impedir que haga cosas que no son seguras o que pueden ser destructivas. Y él tiene que tratar de realizar tareas enloquecedoramente difíciles para aprender. Así que es inevitable que se produzca algún que otro llanto de cólera y frustración. Pero un bebé que se siente obstaculizado en sus acciones por los adultos que lo limitan, o que sale continuamente derrotado por su propia inmadurez, no adelantará mucho en su desarrollo. Tiene que encontrar un cierto equilibrio entre demasiada frustración y muy poca.
Si usted o su cuidadora tienen que frustrar al bebé porque lo que desea hacer es peligroso o le puede causar daño, utilice la gran facilidad con la que se le puede distraer. No hay necesidad de entablar una larga pelea con él por la puerta de la nevera. Sáquelo inmediatamente de la cocina y, tras una breve explosión de cólera, él se olvidará del asunto... por el momento. Esa noche, ponga en la puerta un seguro a prueba de niños y cuando a él se le ocurra volver a abrirla al día siguiente, sólo se sentirá momentáneamente furioso al comprobar que no puede. Una vez que sepa que no puede hacerlo, dejará de intentarlo y dedicará su atención a otra cosa.
Cuando el bebé se frustre a sí mismo, le cabe a usted juzgar si puede aprender algo de la situación en que se ha metido, o si es mejor dejar que se desfogue con una llantina de furia frustrada. Si hace esfuerzos por abrir la tapa de la caja de juguetes y hay una buena posibilidad de que lo consiga, déjelo hacer. El éxito hará que haya valido la pena el esfuerzo. Pero si se da cuenta de que no lo conseguirá por sí solo, ayúdelo pronto antes que tarde. N o ofenderá su dignidad al interferir. Para él todavía no es importante arreglárselas por sí solo. Lo único que quiere es abrir esa tapa, sin importarle cómo.
Algunos bebés parecen tener mayor tolerancia que otros a la frustración; un revés que hace aullar a uno, sólo provoca una sonrisa en otro. Los padres no pueden hacer gran cosa respecto a estas diferencias innatas, por lo que no vale la pena preocuparse por ellas.

RECUERDA: las recomendaciones del foro NO PUEDEN sustituir a la consulta con un medico (NI LO PRETENDEN)

- Mar, 18 Sep 2007, 12:32 #182965 Cuando mi niño empezó así (más o menos a los 8 meses) me temía que la cosa fuese a más, y entonces le decía muy contenta, qué bien!!!. Ahora te voy a enseñar a gritar bajito, y lo que hacía era con muchos gestos abrir mucho la boca y aspirar haciendo un poco de ruido, o gritar para dentro, vaya, es una cosa muy rara pero a él le pareció gracioso y cambió los gritos de verdad por esos otros gritos mudos que le daban mucha risa. Ya se le han olvidado, pero conseguí que no gritase, aunque los otros gritos mudos si los hacía sobre todo cuando nos quería llamar y se mondaba de risa.