Mi Nico tiene ahora 22 meses recién cumplidos, y tiene las rabietas normales de esta etapa. Soy partidaria de educar con tolerancia y nunca le he pegado, aunque alguna vez me saca de quicio y le doy un grito. Ya sé que eso es perder la partida, pero es que a veces me puede. Por otro lado es un niño muy grandote, tiene muchísima fuerza, y cuando se pone burriquillo no puedo con él. Le gusta trepar por todas partes, te lo coge todo...
Ya sé que hasta ahora no he contado nada fuera de lo normal, para mí el problema viene con mi familia política, que son los que me cuidan al nene durante todo el día porque trabajo fuera, muy lejos, y la mayor parte de los días ni siquiera puedo ir a comer.
Mi suegra cuida al nene con muchísimo cariño pero le ocurre lo mismo que a mí con lo de las rabietas. Ella dice que hasta ahora no le ha dado un azote porque yo no la dejo, que si no... (quiero creer que es verdad).
Pero ayer mi cuñado le dio un azote al nene porque cogió una rabieta. Me ha sentado fatal. Yo no creo en ese tipo de educación, pero no puedo decir nada porque ya he tenido discusiones con ellos sobre este tema y siempre salgo perdiendo. Se juntan mi marido y su hermano y entre los dos me dan todo tipo de lecciones sobre educación y que la culpa de las rabietas es mía, que lo estoy malcriando, que no podemos seguir así, que hay que "enderezarle" etc. y por mucho que intento dar mis razones, son dos contra uno, y siempre acabo perdiendo.
Nico es el primer nene de la familia, ninguno de nosotros tiene experiencia, pero ellos se justifican porque su método es el que se ha usado siempre, el que usaron con ellos, lo mío es malcriar...
Bueno, perdonad el rollo que he soltado, pero necesito ayuda para intentar convencerlos. Por favor, dadme alguna idea.
Muchas gracias por leerme.