Hace cinco años a esta hora misma, llamaba a casa de mis padres desde Almería, que fuí con mi marido acompañándolo en su trabajo, y le dije a mi padre: Papá, te llevo un regalito de vuelta, pero no lo podrás abrir hasta dentro de nueve meses. Estoy embarazada de nuevo!!! Mi padre el pobre no podía ni contestarme, entre risas y lágrimas me dijo que estaba muy contento, y yo tenía un nudo en la garganta, pero uno más fuerte en el corazón, una semana nates le habían diagnosticado un tumor en un ojo.
Antes de hacerme el predictor, estaba temblando, deseaba con todas mis fuerzas estar embarazada, estaba casi segura al cien por cien, pero claro, faltaba hacerme el test, sabía que no tenía mucho tiempo, quería que mi padre disfrutara de su único nieto el tiempo que le quedaba, y si no estaba embarazada lo mismo ni lo conocía.
Cuando ví las dos rallitas, se mezclaron los dos sentimientos de pena y de alegría, és una sensación muy rara, como de que venía alguien mujy especial , pero se me iba una parte de mi corazón.
Creo que alguien nos envió a un ángel , que hizo a su abuelo durante diez meses al hombre más feliz y rgulloso del mundo, que se fué su abuelo pero quedó ella para alegrarnos nuestros corazones, que el destino ha querido que tenga los mismos gestos y las mismas ocurrencias que él, pero que se me parte el alma porque no la está disfrutando, con las ganas que él tenía, que esta vida és muy injusta.
Bueno quería compartir esta experiencia con vosotros que ya formais también parte de mi corazón, son experiencias vitales, muy tristes, pero que no hay más remedio que pasarlas.
También quería celebrar que hace cinco años me enteré que estaba embarazada de mi Sara, que és lo mejor que me ha pasado en el mundo, y que ha sido el pilar de esta familia para que no nos derrumbáramos, y la alegría de todo el que se cruza en su vida.
Gracias por escucharme