Mi hijo coge rabietas, pero nuestra actitud hacia a ellas hace que no sea un problema, cuando se sube encima de la mesa, de una silla, etc., le miro a los ojos, le explico.... y sin gritos entiende que eso no esta bien (por peligroso) y se baja (y un millon de exemplos mas), duerme de maravilla (lo que entendemos nosotras por “dormir de maravilla” ) es un niño cariñoso, rebelde, simpático, tímido o extrovertido, según le da, un niño que come genial (alguien podría pensar que come poco, otros que come mucho, me da igual, come lo que tiene hambre, lo que quiere y cuando quiere) seguro de si mismo, que va a su ritmo en el aprendizaje de las cosas, sin prisas pero sin pausas, al que podemos llevar a cualquier sitio por su buen comportamiento, que quiere y se deja querer, un niño feliz.
Se que el camino es muy largo y es mucha la desesperación que nos queda, pero se que llegaremos al final del camino felices y victoriosos.
Nuestro método: seguir nuestro instinto animal.
Un abrazo muy fuerte. Una mama muy, muy feliz!
P.D. aprovecho para decir que estoy y no estoy en el foro, aunque hasta el 20 de agosto no empiezo las vacaciones estos meses estoy liada en el trabajo y el calor insufrible me hace hacer otras cosas. Espero muy pronto retomar el hilo y ayudaros en lo que pueda.