Los pisos en Serbia son muy pequeños, muchas veces sólo tienen un dormitorio, así que padres e hijos duermen juntos y cuando son más mayores los padres suelen dormir en el salón. Lo cierto es que mis cuñados y sus hijos de 3 años y quince meses duermen todos en la misma habitación y hasta hace poco colechando pues mi sobrina tomaba pecho y mi sobrino tenía celos. Mis cuñados están bien económicamente para ese país y su piso tiene 2 dormitorios, pero en el otro cuarto está el ordenador y ni se plantean pasar a los niños allí.
Yo andaba perocupada porque mi hijo con 16 meses no sabía dormir solo y le iba a pedir consejo a mi suegra que ha trabajado en una guardería, cuando vi que esta dormía a mi sobrina de quince meses en bracitos y cantándole nanas. así que como no veía nada malo en ello, para qué preguntar.
Otra curiosidad es con la alimentación. Allí no se tritura tanto las papillas, de hecho los potitos de allí están menos batidos. Me sorprendió que mi cuñada no usara batidora para su bebé y que con 5 meses y medio le diera el puré machacado con un tenedor nada más. Pero ahora viendo a mi sobri comer exactamente la misma comida que los adultos y coger los tomates y comérselos a modiscos con 15 meses, y beber el zumo de una pajita, la verdad que me ha dado envidia. En el parque veía a los bebes de 10 meses comer el plátano a mordiscos y beber el agua directamente del vaso. Por cierto que cuando mi bebé tenía 6 meses y no quería tomar nada más que teta, todo el mundo me dijo que esperase a que fuera más mayorcito, que no pasaba nada porque empezase con la laimentación complementaria más tarde.
Lo cierto es que a ellos no les decían los pediatras que no cogieran a los hijos en brazos porque les malcriaban ni que no les pudieran alimentar por la noche como les decían a nuestros padres y eso se nota, en el parque veíoa a muchos bebés en brazos a pesar de tener carrito.
Claro que no es que todo lo que ellos hacen me parezca estupendo, por ejemplo, no me gusta que allí les dan dulces muy pronto y veo a muchos niños pequeños con caries. Tampoco me gusta que cumplen la cuarentena a rajatabla y los recioén nacidos no ven el sol hasta pasados cuarenta días.
Pero todo esto me ha reafirmado en que no hay una manera única de criar a los hijos, y que no me pueden decir que hago en seguir teniendo a mi hijo en nuestro cuarto. Pasar a los bebés a su proopia habitación no deja de ser, después de esto, más que una imposición cultural más.
Un saludo.