A veces me paso, lo veo tomando colacao y pienso "ya caí"...compré gelatina para hacer y la tengo escondida a ver si se le pasa.
He imprimido el tren d ela semana para decirle que hay un día en elque todo está permitido.Pero luego me arrepentí. Primero, porque es verano y es difícil hacer cumplir eso cuando vamos a estar en muchos sitios.
Luego porque me planteo hasta qué punto un yogur de coco o una gelatina o un zumo de bote son chucherías. No es algo d etodos los días, pero sí son alimento (porque mi hijo los caramelos y golosinas no las pide) Y, bueno, hago esta reflexión en voz alta, que pienso que me estaba volviendo un poco obsesiva. Que prometo relarme y dejar a mi hijo que sea un niño. Y porque ayer acabé llorando, porque a julio se le antojaron churros (su tío se los ofreció) estaban congelados y eran las nueve d ela noche, y no había comido nada....y me negé a que comiera churros. Me negé