Fijáos que os digo que soy yo la que he podido dormir, porque Laia es pronto para que duerma de un tirón; tiene 2 años y 2 meses y como dice Rosa Jové, todavía son normales los despertares. Lo que hemos hecho es el plan padre a los 2 años, justo al saber yo que vuelvo a estar embarazada, y por fin Laia lo ha aceptado.
Fueron varios intentos en etapas anteriores, pero no hubo manera, Laia era capaz de trepar sobre su padre para pasarse a mi lado a servirse de teta full night. Sin embargo, los 2 años han sido el punto clarísimo de inflexión, y hasta se va contentísima a dormir con su papá (meses antes le daba el berrinche si no la dormía yo).
Por supuesto, él está orgullosísimo y con todo, se nos ha ido el mal humor que teníamos de poco dormir y de discutirnos porque Laia siempre prefería a su mamá y papá se sentía desplazado.
Ahora Laia tiene sus microdespertares pero ve que a su lado no hay teta, sino su padre, así que se vuelve a dormir sin apenas decir ni pío, y yo ni me entero.
Paralelamente, parece que ha alargado los tiempos. El primer día yo alucinaba, a las 3 horas -que es lo máximo que Laia jamás había dormido seguido- yo me despertaba atenta a su demanda... y nada, ella seguía durmiendo. Tuve que "aprender" yo a dormir sin estar pendiente de ella. Y la primera vez que me desperté, y en el despertador eran las 8h, y eso quería decir que había dormido 8 horas por primera vez en 2 años... no me lo podía creer!
Así que, chicas, todo llega. Paciencia y mucho amor!