Hoy es un lunes un tanto raro para mi. A las 8 en punto de la mañana nos han avisado de que ha fallecido mi abuelo. Tenía 82 años y un alzeimer que lo ha destrozado los últimos 5 años...
Aunque parezca mentira estoy aliviada. Los dos últimos años han sido terribles para él (y para todos los que lo queríamos) porque dejó de ser persona, dejó de sentir... olvidó quien era y quienes eramos para convertirse en un cuerpo que albergaba a aquel señor rubio de ojos verdes, de metro casi 90, 100 kg y con un genio tremendo...
Me quedo con su vitalidad, con los bailes que se hechó el día de mi boda con todas mis amigas, a pesar de que ya estaba enfermo, con la foto que le sacamos con Pablo el verano pasado cuando fui a presentárselo...
Me quedo con la sonrisa de mi abuelo Sebastian y con su cara, exactamente igual que la de mi padre...
Un beso allí donde estes abuelo. Te quiere tu nieta Helena.