- Jue, 07 Jun 2007, 12:53
#148791
Mi hija acaba de cumplir 1 año. Tomó lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses (no fué facil trabajando fuera de casa, gracias al sacaleches y las neveras portátiles) y aún no ha probado la lecha artificial pues para sus papillas todavía uso la mia. Tal vez eso sea el origen de la situación actual. La acuesto sobre las 21 horas en mi cama y la duermo (no siempre es fácil) dándole de mamar acostada a su lado. Una vez dormida, la paso a su cuna. Pero empieza a llorar a las 3 ó 4 horas, y como yo estoy muy cansada (trabajo fuera de casa) la llevo a mi cama, y mientras le doy de mamar, creo que me duermo yo antes que ella. El caso es que ya se queda ahí, entre nosotros, y se dá la circunstancia de que dormimos (los 3) en una cama individual por motivos provisionales que se alargarán un par de años. Ya sé que pensaréis que no es posible, pero os aseguro que sí lo es, aunque claro, para que ella no esté estrecha, mi espalda duerme casi fuera y me duele cada día más. El caso es que estoy tan cansada que no soy capaz de hacer el esfuerzo de dormirla sin teta, cantando y paseando por la casa durante un buen rato. Además, ella se retuerce contorsionandose para alcanzar el pezón a toda costa, y en mis brazos sólo chilla y estira mi camiseta para que se lo dé. Al final, ella y mi cansancio me hacen ceder y me consuelo pensando que igual no es tan importante que se vuelva a dormir sin la teta. Ya sé que una opción es que se levante el padre, pero como trabaja a turnos, y ademas la cuida por las mañanas mientras yo trabajo, hay días que apenas duerme 5 horas y no le puedo pedir que encima se levante de noche cuando llora! La niña pasa así la noche y muchas veces (por no decir siempre) 1 hora antes de que yo tenga que levantarme para ir a trabajar, "pide" su ración de teta y claro, 2 horas después al desayunar no prueba bocado de la papilla de cereales, supongo que porque está llena con tanta leche nocturna. Pero si no le doy esa toma, es imposible volverla a dormir, y también que yo pueda prepararme y llegar a tiempo a mi trabajo. El papá, claro, llega justo unos minutos antes de la hora que yo he de marcharme. Durante el día no duerme apenas, tan sólo una siesta antes o después de comer de 1/2 hora de duración aprox.
Come sobre las 13 horas (bueno, le ofrecemos la comida, pero apenas como 4 ó 5 cucharaditas) y cuando yo llego a las 15 horas, "exige" su ración de teta, y parece que esté muerta de hambre, porque mama casi con desesperación, y muchas veces es cuando se queda dormida en la siesta. Claro, a las 17 horas vuelve a estar sin hambre, y apenas come la papilla de frutas. En fin...
A todo esto, tiene anemia y la estamos tratando con suplementos de hierro y dieta especial de carnes rojas. He leido que la leche materna, pese a todas sus ventajas, carece de hierro suficiente a esta edad, y a veces me invade la sensación de que puede estar tomando demasiada leche, y por eso no tiene hambre para comerse su papilla al mediodia y a la cena.
Perdonar todo este rollo, pero estoy llena de dudas. A veces tengo la sensación de que todo se solucionaría con rutinas, que en nuestra situación es imposible. Claro, a cambio de este "perjuicio" tenemos la ventaja de que no ha sido necesario dejarla con canguros durante su primer año. En septiembre empezará la guarderia y el ritmo se ordenará un poco, pero entretanto... Qué os parece... ¿realmente tendría que quitarle las tomas nocturnas, aunque llore?(El biberon con mi leche no lo quiere) ¿Creéis que hay algo que estoy haciendo mal y hay que cambiarlo?
Muchas gracias anticipadas por vuestros consejos.