Realmente necesito babero, y saben pensaba ponerlo en mi habitación, pero el viernes pasado que fue el cumpleaños de Mariana, lo colgué en la pared al final del pasillo, y quedó perfecto, toda la gente que fue, lo admiró... claro yo más que orgullosa, otro día le voy a tomar fotos a los otros cuadritos que ha pintado con su papi.