Y, por cierto, y para mi desgracia y la de mi hijo, verdadero devorador de medicinas, esta debe estar amarga, porque lo tengo que obligar a que se la tome Lo tengo que sujetar y abrirle la boca el me la escupe, yo me enfado, el pobre llora y me die: mama sa enfadao proque julio a escupio la medisina y vuelta a empezar (y el ventolín obligado también, y el suero por la nariz, un dolor)