Creo que el problema de base es que le quitamos nosotros el pañal sin que fuera ella la que lo pidiera. Cuando Candela cumplió los 2 años el pediatra nos dijo que era hora de quitárselo y como la verdad es que el hombre es muy sensato, pues le hicimos caso. Le compramos un reductor para la taza y de día le compramos braguitas-pañal (de las de subir y bajar). Se lo tomó muy bien y empezó a utilizar la taza, casi siempre porque nosotros le preguntábamos si tenía ganas. Un día empezó a pedirlo ella y en estas que se va unos días al pueblo con los abuelos. Una de las veces al abuelo no se le ocurre otra cosa que dejarla sin nada pero con los pantalones puestos y pasó lo que tenía que pasar, que se hizo caca encima. El abuelo (con su mejor intención) le dijo que era una cochina. A partir de ahí no sólo se lo hacía todo otra vez en la braguita pañal sino que no lo decía y si le preguntabas porque olía, decía que no y ponía el culo contra la pared. De nada sirvieron todos los mimos. Es que somos de familia andaluza y ella se ha llevado la vena dramática.
En fin, que cuando parecía que volvía a pedir nació Santiago y otra vez para atrás. Ahora tiene 3 años y dos meses, en la guardería lo pide todo pero en cuanto sale no pide nada y lo peor es que las últimas veces hemos optado por las broncas porque me he estresado un poco porque en Septiembre tiene que ir al cole sin pañal y creo que lo hemos fastidiado más. No sé si es por celos porque Santiago tiene ya siete meses y es la única muestra de "celos" de Candela. Cuando le queremos volver a poner el pañal se pone a llorar porque dice que ya es mayor y jura y perjura que va a pedir, pero a lo mejor pide una vez y nada más.
¡¡Socorro!! ya no sabemos como comportarnos con el tema. Sólo tengo claro que no volvemos a enfadarnos porque la pobre acaba con una congoja que nos deja mal cuerpo. ¿Alguien ha pasado por lo mismo? Encima me entra complejo de culpa.
Muchos besos a todos.
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Paloma, José María, Candela 07-03-2004 y Santigo 08-10-2006