- Dom, 27 Nov 2005, 10:57
#10993
A mí me pasó exactamente lo mismo con Alex a los 16 meses. Tenía perfectamente tomada la rutina de buenas noches y se dormía al pecho sin problemas. Pero empezó unos días a despertarse en medio de la noche llorando de forma inconsolable y a querer salir de la habitación a toda costa, si no lo sacaba no paraba de llorar. No quería teta ni nada, sólo salir de la habitación. Lo que hacía era darle una vuelta por la casa hasta que se dormía meciéndolo mientras le cantaba o le contaba cosas aburridas y repetitivas y explicándole que todo el mundo estaba dormido, o hasta que aceptaba la teta y se dormía a la teta.
A los pocos días empezó a hacer lo mismo al ponerle a dormir, no solo en medio de la noche, y la verdad es que me preocupé bastante porque pasó a ser complicadísimo dormirle (y si yo estaba trabajando y lo tenía que dormir el padre, ya era imposible, se quedaba despierto hasta que yo llegaba a las 12 o 12 y media de la noche). Entonces lo que hacía era apagar todas las luces de la casa antes de salir del baño para acostarle (mi rutina es cena-baño-pecho-dormir), para que, si tenía que sacarle de la habitación, viera que ya era de noche, que estaba todo el mundo durmiendo, que había que dormir, etc. (el padre se escondía en una habitación, la tela apagada, silencio...)
Nos fuimos unos días de vacaciones y en casa de los abuelos durmió genial (menos mal) pero a la vuelta, ya la primera noche hizo lo mismo. Volví a darle vueltas por la casa con todo a oscuras, se durmió y no lo ha vuelto a hacer. Ha recuperado su rutina de buenas noches, se engancha a la teta con una sonrisa (hubo días en que no quería ni que le tomara en brazos porque sabía que era para ir a dormir) y se queda dormido sin protestar. No ha vuelto a despertarse llorando desconsolado de esa manera.
Yo creo que le coincidieron unas noches de terrores nocturnos y de alguna manera tomó miedo a dormirse. Además, coincide que cuando yo voy a trabajar, normalmente salgo cuando está dormido, ya sea por la mañana, porque salgo muy temprano, o por la tarde, porque salgo de casa a la hora de la siesta (trabajo a turnos, a veces por la mañana y a veces por la tarde). Quizás también tenía miedo a que si se dormía, yo desapareciera. Por ello, los días que trabajo le explico antes de dormirse (no justo antes, sino un rato antes) que me tengo que ir a trabajar, que le va a cuidar su papá cuando se despierte, y que van a ir de paseo, se lo van a pasar genial y que luego cuando esté dormidito vendrá mamá. Parece que funciona bien...
Lo de la tele de los sueños yo no lo he probado exactamente así, pero estoy segura de que funciona (yo simplemente, al contarle cómo había sido el día - otro consejo fantástico de Guiomar - le decía que no iba a soñar cosas malas sino buenas).
En resumen, que me he enrollado mucho: que yo creo que sí son terrores nocturnos o pesadillas, que es normal, que se le pasarán, y que tengas paciencia y que ya verás como dándole muchos mimos y enseñándole que no hay nada a lo que temer, volverán las cosas a la normalidad poco a poco. También puedes observar si ha habido algún cambio en su vida que le pueda estar afectando, y reducir su exposición (si es que la tiene) a imágenes negativas (tele, cuentos de miedo...)
Espero que todo este rollo te ayude en algo... ¡Suerte y paciencia!
Aran, mamá de Alex (17m)