Puede suceder que una madre lactante se encuentre en la necesidad de realizar determinadas pruebas médicas, como es el caso de una resonancia mágnetica nuclear, una tomografía axial computerizada o una radiografía y tenga dudas sobre si debe suspender el amamantamiento. En todos los casos citados, incluso si se usan productos de contraste, la lactancia puede continuar sin contraindicaciones.
Los rayos X no permanecen en el objeto irradiado, no se transmiten a través de la leche materna ni alteran sus propiedades. Tampoco hay ningun riesgo para el lactante si la madre se somete a una ecografía, tomografía computerizada o resonancia magnética nuclear. Los contrastes son productos que apenas pasan a la leche y casi no hay posibilidad de efectos secundarios, por lo que no es preciso desechar la leche y puede amamantarse inmediatamente.
Todos los contrastes de gadolinio habitualmente usados para la resonancia magnética son plenamente compatibles con la lactancia materna. Igual que los contrastes yodados. No hay que esperar ni un minuto para dar el pecho.
Puede suceder que se nos indique descartar la leche y esperar 24 horas, pero esta recomendación no tiene a su favor evidencias científicas y todos los expertos señalan que es posible mantener el amamantamiento normalmente.
Obviamente algunas enfermedades por parte de la madre o el niño pueden necesitar medicamentos y en cada caso habría que valorar, en el caso de existir algún riesgo, si los beneficios del amamantamiento superar a los posibles efectos secundarios y siempre buscar medicamentos compatibles.
Por tanto, ante la recomendación de cesar el amamantamiento si una madre lactante debe realizar pruebas diagnósticas como la RMN, TAC o radiografía, la evidencia científica señala que no es necesario y se puede amamantar inmediatamente después de su realización, incluso si se usa contraste.
"Gigoló" (vividora) de la maternidad
¡Va por Queli!
Yo de mayor quiero ser.... EMPODERANTE
¡Va por Lolilolo!