Como os decía, mi intención inicial era que la lactancia durara como mucho un año y en ese momento creo que me habría quedado casi en shock si hubiera escuchado una historia como la que yo ahora os narro pero es algo que ha sucedido de manera natural, dejando pasar el tiempo, disfrutando con la experiencia y aceptando la situación yo en todo momento (es decir, mi hija podría estar hace años destetada, pero yo no he querido obligarla ni he aprovechado los momentos en que ha estado desinteresada por el pecho).
La verdad es que me siento ORGULLOSA, en mayúsculas, de haber llegado hasta aquí. Tengo el referente de Tere Rico, del grupo Amamantar, que dio el pecho a su hijo hasta los siete años y medio y cuento con el apoyo y comprensión de muchas personas que saben que la lactancia prolongada tiene muchos beneficios a nivel emocional, nutritivo e inmunológico.
Mi hija mayor es una niña muy sana, con un crecimiento muy bueno (es de las más altas de su clase y está perfecta de peso), espabiladísima, alegre y feliz de seguir con su teta.
Cuando tenía tres años y pico yo creí que se iba a destetar porque tomaba el pecho una vez cada día o día y medio, pero entonces mi marido y yo pensamos en ser padres de nuevo y el embarazo lo logré ese mismo mes. Le dije que iba a tener un hermanito. Que a partir de ahora muchas personas le dirían que debía de dejar la teta, pero que yo no lo haría, porque no había nada de malo en dar el pecho durante el embarazo y que yo se lo daría hasta que ella quisiera. Le comenté que si ella solita dejaba la teta antes de nacer el bebé, cuando éste naciera yo me sacaría de vez en cuando leche y le haría con ella el cola cao de las mañanas. Esto le hizo mucha gracia y me decía que sí.
Lo cierto es que durante el embarazo se reenganchó mucho al pecho, comenzó a mamar bastante, no se olvidó de la teta ni un solo día y estando yo con contracciones el día del parto le di una buena toma de pecho, prometiéndole que cuando viniera a verme al hospital podría tomar de nuevo.
Su hermana nació el 9 de julio de 2005, perfecta, con apgar 10-10-10, se enganchó al pecho en la primera media hora tras el parto y cuando mi hija mayor vino a verla se comportó de una manera muy dulce y maternal con ella. Le pregunté si quería tomar pecho y me dijo que sí. Así que le permití mamar en un par de ocasiones. El día del alta me dio una fuerte subida de leche y en casa pudo tomar todo el pecho que quiso. La peque sólo había perdido 60 gr. Al día siguiente (ella tenía tres días y medio de vida) regresamos al hospital a hacerle las pruebas metabólicas y...¡¡sorpresa!! Ya estaba ganando peso. Con 12 días de vida su excedente era de 660 gr, para sorpresa de la pediatra, que me decía que eso lo tendría que ganar el primer mes de vida. Se crió super gordita y seguro que, en buena parte, fue gracias a que su hermana le ayudaba a conseguir la leche más grasa del final de la toma sin ningún esfuerzo.
En fin, estoy encantada de llevar 7 años dando el pecho, casi tres años de los cuales es en tándem. Sé que mi leche es buenísima para las dos, en buena parte de sus vidas ha sido casi su único alimento y he comprobado que las ha alimentado enormemente. Ellas disfrutan tomando el pecho juntas. Se dan la mano, se sonríen, a veces sueltan carcajadas y, en ocasiones, la mayor dice "1, 2 y...3" y a este aviso pegan un bote y se cambian de teta, muriéndose de la risa al ver mi cara de sobresalto.
Luego están los comentarios divertidos que a veces te hacen sobre la leche, las apreciaciones sobre la cantidad y sabor, la comparativa con la leche de vaca (ambas están de acuerdo que mi leche tiene mejor sabor)...
No sé cuánto tiempo de lactancia me queda por delante. La mayor en la actualidad hace dos tomas cada día: una a mediodía, antes de que me vaya a trabajar, y otra por la noche después de cenar. Yo creo que medio año más sí que tomará pecho (y tal vez más).
La pequeña, por su parte, lleva una temporada muy entetada, así que tengo claro que antes de los 4 años no se desteta.
En fin, perdonad la extensión. Quería compartir con vosotros esta experiencia, os quería resumir estos 7 años de lactancia y, la verdad, querría haberlo hecho de un modo más emotivo, poético y lleno de bonitas metáforas, pero con el jaleo que llevamos hoy con los preparativos de la celebración mi inspiración no ha dado para más
Gracias a todos los que me han ayudado a llegar aquí, como el es caso de Toni Oliver (matrón que me atendió el primer embarazo y nos daba clases de lactancia a las embarazadas inexpertas), al foro de LM de la AEPED (fueron los primeros que me apoyaron cuando a los 27 meses estaba muy presionada por el entorno y con dudas), Begoña Burguera (pediatra de mi hospital muy pro-lactancia), Dr. Carlos González (él dice que la lactancia prolongada comienza a los 7 años, jejeje, y me ha hecho cambiar el chip en muchas cosas), madres que llevan años dando el pecho o haciendo el tándem que me han servido su ejemplo a quienes me han ofrecido su apoyo, ayuda y empatía.
Un abrazo para todos. Espero que mi experiencia pueda servir a alguien.