- Lun, 05 Abr 2010, 15:12
#364104
Por mí no te puedo hablar porque a Raúl, obviamente, no le di teta
y Ainhoa aunque sigue colechando y tetando, cada vez se va despegando más de mí (que ya era hora, por otro lado
). Sí te puedo hablar por mi cuñada.
Su hijo mayor, Hugo, mamó hasta pasado los 4 años y medio. Su segunda hija, teniendo tb la teta a modo de barra libre, la dejó porque quiso a los 2 años y medio. El mayor, toda la vida luchando por dormir con los papis (no ha podido el pobre porque le aplicaron el
), la pequeña, ni lo ha intentado, es feliz en su habitación ella solita. El mayor no es capaz de quedarse en casa de nadie a dormir, la pequeña se va con el primer vecino que se lo proponga
Como verás, es cuestión de personalidad (al menos en este caso), pero evidentemente creo que, aparte de los factores de personalidad, hay algo que hace que durante los primeros años sí que influya el colecho y la teta. Al principio puede parecer que van más atrasados que otros niños porque son más dependientes, pero con los años y tras comprobarlo en múltiples ocasiones, creo firmemente que eso les da seguridad para crecer más libres y seguros de sí mismos en el futuro. Los niños que han tenido contacto, teta, colecho, etc. son los más seguros de sí mismos en un futuro (con lo cual más independientes, a nuestro pesar).
Muchas veces miro a mi alrededor y recuerdo cómo éramos mis primos y yo de pequeños. Se cumple siempre que los que más mimados hemos estado (me incluyo porque como hija menor, mis padres me mimaron muuuuucho más que a mis hermanos) somos los más independientes de mayores. Tengo yo una prima que nos metíamos con ella de pequeña de los mimos que su madre le daba y esa misma niña "supuestamente malcriada" con 16 años estaba pasando su primer verano en Inglaterra, ha estudiado 2 carreras (una de ellas finalizada en Alemania) y habla 5 idiomas gracias a los años que se ha pasado formándose viajando por el mundo.
No sé, sé que es algo muy subjetivo, pero de verdad te digo que se lo merecen, que bien vale unos añillos de sacrificios nuestros por una felicidad inmensa para ellos el resto de sus vidas.
QUÉ SUERTE HAY QUE TENER AL NACER.- (SKA-P)