- Jue, 27 Nov 2008, 02:32
#295115
Para mí también fue muy duro al principio:
En el hospital no me ayudaron NADA
-Mi hija no se enganchaba bien y como pedia tan a menudo...yo lloraba pensando que no tenia leche.
-Mi suegra decia que le diese un biberon
-Mi suegro tambien se metia y decia lo mismo cuando fue un poco más mayor y se empezó a chupar los puños
-Fui a pedir ayuda a la matrona y me contestò que ella no estaba para esas cosas y que lo que tenía que hacer era abrirle la boca porque al fin y al cabo mi hija era un mamífero hambriento.
Por suerte di con LLL y en la primera reunión comprendí que era cuestión de tiempo y que merecía la pena luchar y también me hicieron ver que todo eran miedos mios (soy madre primeriza) ya que mi hija cogía peso y estaba preciosa.
Pasado el tiempo empezaron con el rollo de que no podía ser bueno para su estómago, que tenía que descansar al menos 2 horas entre toma y toma, vete espaciándolas, hazle esperar 10 minutos, otro dia 15...
Más adelante la comparaban con otros bebés de la familia:
-fulanito ya come cereales y puré
-menganito duerme toda la noche, dale un biberón y verás
-cuándo le vas a quitar la teta
-así no puedes seguir, déjale llorar y come tú
-pero...y tienes leche?
ahora cuando la ofrezco pecho me dicen: pero... Por qué le das? si no está llorando...
-quítasela y así recuperas tu vida y puedes salir
y para colmo, como explico en un post de hace dos días, me han diagnosticado hipotiroidismo y el endocrino prácticamente me ha ordenado que le quite el pecho porque "ya he cumplido"
POR SUPUESTO NO PIENSO HACERLO, NO HAY MOTIVO
Incluso su papá, que no suele meterse, a veces me ha soltado lo de dèjala llorar y come tú, a lo mejor ya es el momento de quitársela
Creo como vosotras que hay muy poco apoyo. Sin ir más lejos nos recomiendan LME hasta los 6 meses pero, ¡sólo nos dan 16 semanas de baja maternal!
Yo por suerte he podido pedir excedencia en el trabajo y llevo 11 meses disfrutando de mi hija y nuestra tetita.
GRACIAS TAMBIEN A TODAS VOSOTRAS POR VUESTROS CONSEJOS, APOYO, COMPAÑÍA Y COMPRENSION
Estoy segura de que nuestros hijos serán mucho más felices y de que si todos los niños fuesen educados con el cariño y el respeto con el que nosotras intentamos hacerlo, no habría tantos adultos llenos de rabia, odio y agresividad.