La prueba consiste en que te descubren los dos brazos y en los antebrazos, con un cuenta gotas te van depositando un poco de cada elemento alérgeno, luego con una mini-cuchillita (es que no sé cuál es su nombre técnico, tiene la puna como un alfiler o menos), te pinchan para que el líquido penetre en la piel. Pues bien, le dije a Rodrigo que le iban a hacer eso, que le pondrían como muchas gotitas de lluvia en los brazos y que con un boli le pondrían unas letras al lado para saber dónde habían puesto la gotita y su nombre, y luego iba a sentir un pinchacito semejante a cuando le pica un mosquito, incluso menor y que no le dolería. Después tendría que tener los brazos estirados y que notaría que le picaba en algunos sitios donde le habían puesto la gotita pero que no se podía rascar e incluso que se pondría algo rojo y le saldría un habón, lo mismo que cuando le pica un mosquito, pero que si se rascaba le iba a picar mucho más.
Mientras hacía efecto el alergeno, estuvimos jugando (en el hospital tiene una pequeña salita con juguetes) y cada vez que se intentaba rasacar le distraía con algo. Cuando pasó el tiempo le dibujaron el contorno de los sitios donde le dio algo de reacción, para medir el tamaño y luego le limpiaron con una toallita que tiene un producto que calma el picor.
Lo que te puede resultar más complejo es evitar que se rasque, sobre todo si tiene una reacción algo fuerte, porque por experiencia sé que pica pucho. Llevate algo que le atraiga mucho para intentar que se destraiga.
Salud