- Mié, 10 Ago 2011, 08:19
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Hola Petuia, siento mucho lo de tu suegro.
Mi madre falleció el año pasado, exactamente cuando mi hija tenía 2 años y 9 meses como tu hijo. Yo creo que depende un poco de la madurez de cada niño y de lo que pueda llegar a comprender. Mi hija habla y comprende perfectisimamente (dentro de sus límites claro) todo desde que era muy pequeñita y por eso yo decidí contárselo. Ella ha conocido a mi madre prácticamente en cama siempre (y los últimos meses sólo le decíamos: "me voy al hospital a ver a la abuela x"). Llegaba a su casa, recorría el pasillo hasta su habitación y jugaba con ella a poner pegatinas en cuentos.
Yo no creo en cielo ni el infierno y por lo tanto a mi hija nunca le dije que la abuelita está en el cielo. Simplemente le dije que había muerto y que cuando fuésemos a su casa, ella ya no estaría en la habitación, que no la veríamos más, que estaba muy enferma y que los médicos no encontraron una medicina para curarla. Ella habla con naturalidad de mi madre y algunas veces me dice: mamá cuando los médicos encuentren una medicina para la abuela x, le voy a decir que..." yo le vuelvo a explicar que no podremos verla más y ella se queda conforme. Alguna vez me ha preguntado el por qué de la muerte y que dónde está, y simplemente le dije que yo no sé dónde está, que tampoco entiendo muy bien el por qué (es la verdad, ni siquiera los adultos entendemos la muerte) y que también la echo de menos.
Como verás, cosas sencillas, simples y verdaderas. Creo que es lo mejor. Tánteale, intenta averiguar hasta donde puede comprender su mente pero, explícale algo. Pienso que es lo mejor.
Moooooooon!!!!