Lugar donde compartir el día a día de nuestros pequeños.

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por joanaa
#301975 hola,hacia muchisimo que no entraba pero con las dos enanas ando de liada...
tengo una niña de 4 años y otra de 1.mi mayor problema ahora es el mal comportamiento de la mayor.
era muy consentida,aun que la mayoria de las veces no cediamos(alguna si,lo confieso). pero es que ultimamente no obedece a nada,le riñes y se rie...yo estoy de los nervios. nada funciona.Lw hemos quitado los juguetes,la mayoria,pero nada
le castigamos contra la pared y se gira,ni en eso obedece.
la verdad es que estoy de los nervios,se que son celos pero...¿como actuar?
yo intento darle cariño,y su padre lo mismo.su hermana es bastante buena,y no ha notado mucho( o no tanto) el tener que dejarla a ella para atender a su hermana.
antes bañaba a su hermana sola,cuando ella no estaba,pero ella me pidio que las bañara juntas y asi lo hago ahora.
tampoco come mucho ahora,y yo creo que es por lo mismo,por llamar la atencion.
Con su hermana se porta bien,ultimamente la coje ella sola y la pone de pie,ahi tengo que tener mas cuidado. Y la quiere mucho pero...
¿como actuar en estos casos? nunca hacemos comparaciones de :tu hermana si que se porta bien,o a tu hermana la quiero mas que se porta mejor....de eso nada.
s.o.s....
besos y gracias una vez mas
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por Curcuma
#302068 Mi hija tambien pasó al principio por una etapa así y lo que hice fue intentar no reñirle y enfadarme con ella lo menos posible, muchas veces dejaba pasar cosas y me hacia la ciega a ver si pasaba la racha y pasó. Simpre hay cosas y cosas, siempre que no hiciese algo peligroso al hermano, que nunca pasó, solo intentó cogerlo una vez con 2 meses, pero ahí si que hablé con ella seriamente y nunca mas. Quizá si intentas un tiempo hacer todo lo contrario de lo que hacias, o hablar con ella, ya con 4 años puede empezar a razonar un poquitín y a entender las cosas. Ánimo y espero que pase la racha.

Amilingüi Mayo 2003
Brunisky Junio 2007

"Nuestros hijos son nuestros pies en el mundo, nuestro amor por ellos es el eterno combustible de nuestro corazón, su destino es la flecha que tensa nuestro arco vital". (V.A.)
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por Trece
#302093 ¿La riñes mucho? ¿Tienes un momento al día para ella en especial? ¿Has hablado con ella?
¿Sois muy protectores con la pequeña? Sin daros cuenta puede que estéis recriminando a la mayor por la forma de jugar con la pequeña o por lo que hace con ella.
¿Las dejáis jugar juntas a su manera?
¿Está la pequeña comenzando a caminar o aprendiendo alguna habilidad?
Si está aprendiendo algo nuevo la mayor puede sentirse intimidada y temerosa de perder lo que tenía. Hay que procurar hacerla sentir que sigue siendo especial para vosotros.
En estos casos cuanto más la regañes, más la castigues, más enfadada estará con vosotros.
Cada vez que hace algo mal lo hace como grito de auxilio, no lo veais como algo malo.
Intentad durante un día no reñirla, si hace algo mal en lugar de castigarla explicarle sin enfadaros lo que ha hecho mal.
Artículo de Laura Gutman en la revista El mundo de tu bebé (nº 183), titulado
CELOS ENTRE HERMANOS, UNA MIRADA DIFERENTE.
Con el test de embarazo en nuestras manos, y preparándonos mentalmente para la llegada de un nuevo hijo, apenas el niño llora pensamos: "Está celoso". Si se niega a comer: "Está celoso". Si está cansando y tiene un berrinche: "Está celoso". Si nos extraña tras la jornada de trabajo: "Está celoso".
Que la llegada de un hermano va a producir obligatoriamente una cascada de celos en los hermanos mayores es un prejuicio inventado, sostenido y afianzado por los adultos. Es una creencia compartida, y de tanto repetirla sólo se nos ocurre que al niño le sucede "eso" y no pensamos en otras posibilidades.
Basta pasear por las calles embarazada y acompañada por un niño de dos o tres años para que cualquier persona se acerque a decirle "pobrecito", dándole a entender que va a ser destronado de su supuesto reinado. Es un pensamiento tan común entre adultos que nos acomodamos en esa idea y, frente a algún síntoma o demanda delniño, no se nos ocurre reflexionar más allá.

PRIMERAS DUDAS
Con frecuencia nos sucede a la mujeres que, embarazadas por segunda vez, tenemos la sensación y el temor de que no podremos amar a "otro" tan profundamente como amamos a nuestro hijo ya nacido. Es tal la potencia del amor, la vivencia completamente nueva desde que somos madres, que creemos que será irrepetible tamaña intensidad. Sin embargo, el corazón de las madres no se divide, sino que se multiplica con cada hijo que nace.



TEMORES DESPLAZADOS
Lo comprobamos en cuanto nace el segundo hijo y el amor se instala con la naturalidad y el derroche de antaño. Una vez que hemos comprobado que no hay peligro, que podemos amar a dos hijos, luego a tres o a cuatro... desplazamos ese temor a nuestros propios hijos: suponemos que ellos no podrán amar a otro. Y que la presencia de un hermano pequeño necesariamente será en detrimento de no sabemos bien qué, pero que lo vivirán como un hecho negativo. Así lo decidimos.
A partir de ese momento, cualquier actitud molesta del niño, cualquier berrinche, llanto, enfermedad, mal humor, demanda, enfado, insastisfacción o inquietud la juzgaremos con la muletilla bien conocida por todos: "lo que le pasa es que está celoso". Y de ese modo, ya no nos molestaremos en averiguar qué es lo que necesita el nio en ese momento en particular. Simplemente daremos por hecho kque, en presencia de un hermanito en casa, indefectiblemente aparecerán los celos. Sin embargo, no es necesariamente así.
Resulta que ese mismo niño, mucho antes de la presencia de otro bebé en casa, también manifestaba sus inquietudes o necesidades, con mayor o menor suerte a la hora de ser respondido. Es importante tener en cuenta si antes delembarazo o nacimiento del hermanito, el niño o la niña mayor manifestaba síntomas parecidos. Veremos que en muchos casos su actitud no ha variado demasiado. Hay algo que necesita y que merece ser averiguado.

NO ES TAN FÁCIL
La mayoría de los adultos creemos estar dando a nuestros hijos todo cuanto necesitan. Sin embargo, la vida les resulta difícil aun en tiempos de tecnología y confort. Tienen gran cantidad de juguetes, ordenadores, juegos electgrónicos... pero pasan la maor parte del día solos, frente a la pantalla de la televisión, rodeados de adultos que exigen que se lo coman todo, se porten bien, hagan sus deberes, no molesten, se queden quietos y sean educados. La vida cotidiana de los niños pequeños modernos no suele ser demasiado encantadora. Eso es lo que quizás tendremos que atender: las necsidades concretas de cada nio.
Una vez que nace el hermano menor, acomodamos el pensamiento generalizado de que ahora dejará de ser el rey o la reina de la casa. El tema es que los niños no son ni reyes ni príncipes, no tienen vida de soberanos, sino que por el contrario tienen vidas bastante difíciles, enredados en sus propios mundos emocionales muky lejos del mundo de los demás. Raramente pueden contar con los adultos, no saben explicar lo que les está sucediendo y son generalmente juzgados por sus llantos, tristezas o angustias, recibiendo a cambio incomprensión. Hay pocos niños verdadereamente colmados viviendo dentro de familias armoniosas, en las que circula el amor y el diálogo en abundante gratitud.

MIRAR MÁS ALLÁ
Si en la mayoría de los casos estamos alejados del mundo interno de nuestros niños, si no nos ocupamos de averiguar, preguntar, acompañarlos y ayudarlos en sus búsquedas personales, será fácil que nosotros atribuyamos cualquer geswto de incomodidad a los supuestos celos hacia el hermano menor.
Si elevamos el pensamiento, admitiremos que no hay nada más maravilloso que el nacimiento de un hermano, que es el ser más par, más cercano, más "harmanado" que tendremos a lo largo de toda la vida. Y si los padres decidimos tener más hijos para amarlos, lo lógico es compartir ese fin con nuestros hijos ya nacidos para ampliar y aumentar nuestro campo de amor.

AMOR COMPARTIDO
¿Por qué estarían celosos? Nuestros hijos aprenderán a amar a sus hermanos si los incluimos en el mismo circuito de amor y dicha. Si demostramos la felicidad por la nueva presencia, si participamos todos en los cuidados del más pequeño, si respondemos a las demandas y necesidades específicas de los niños mayores y, muy especialmente, si esos niños mayores están acostumbarados a ser mirados y escuchados genuinamente por sus padres, no pueden existir los celos. Porque en esos casos no hay nada que el bebé pueda quitar al mayor. Cuando lcircula la generosidad y la comprensión entre unos y otros, cuando las palabras suavizan y explican los sentimientos confusos, cuando hay rdespeto por las necesidades de cada uno; un nuevo miembro de la familia sólo puede enriquecer las vivencias y las experiencias cotidianas de todos nosotros, incluidos los niños.

QUÉ NECESITA
Cuando nuestro hijo mayor pide algo "imposible de satisfacer" -y por lo tanto creemos que no tiene razón y que lo que le ocurre, simplemente, es que está celoso- podríamos dedicar luego un momento para permanecer con él y bucear juntos en su interior, tratando de averiguar si necesitaq más presencia de un adulto, si no le gusta la escuela, si está cansado, si extraña a un amigo, si pasa demasiado tiempo sin actividades lúdicas. Claro que no es fácil estar con varias pequeños a la vez. Y no es necesariamente la madre quien tiene que satisfacer todas las necesidades de cada niño. Pewro esas necesidades sí merecen ser reconocidas como importantes. Después podremos determinar qué otdra persona allegada puede acompañarle.
Cuando cada niño encuentre palabras para nombrar lo que desea, cuando cada niño sepa que cuenta con su madre, su padre u otro adulto que lo escucha y lo comprende, cuando cada niño obtenga un lugar donde desplegar sus inquietudes, no habrá mortivos para estrar celoso, por más bebés que sigan naciendo en esa familia. Los bebés que nacen no despiertan celos en los hermanos mayores. Sólo muestran necesidades emocionales que ya existían antes de su nacimiento.

ANTE EL DESCONCIERTO
Si las personas mayores decimos "está celoso" ante cada reclamo, el niño terminará por creerlo, aumentando el desconcierto hacia sus propias sensaciones y sintiéndose desvalido y sin recursos para enfrentar su desazón. El niño no está celoso. El niño tiene necesidades y merece ser escuchado y asistido.
Los celos entre hermanos son un invento de los adultos. Y sólo aparaecen cuando nosotros no somos capaces de satisfacer las necesidades genuinas de cada niño. No es verdad que un niño desee estar en el lugar del otro. En absoluto. CAda uno desea ser uno mismo, siempre y cuando reciba la atención y la satisfacción de sus necesidades emocionales mínimas.


CARIÑO DE IDA Y VUELTA
Los niños son naturalmente generosos cuando forman parte de un territorio amoroso para convivir. Y están ávidos por ayudarnos, ser útiles, facilitarnos la vida y ser amados por esos bebés que llegan al mundo para admirarlos. No hay mojor sonrisa que la que un hermano mayor puede robar a su hermano menor cuando éste aún es bebé.

CUANDO UNO SIEMPRE RECIBE
*En primer lugar, revisemos cómo hermos distribuido los roles dentro de nuestra familia.
*Observemos si hemos creado bandos de "buenos" y "malos" entre los adultos.
*Tratemos de comprender cómo empiezan este tipo de escenas antes de que el niño lastimado se nos acerque llorando.
*Entendamos que los celos no tienen nada que ver y que estamos poniendo rótulos a situaciones que no hemos logrado comprender en su totalidad.
*Si no sabemos cómo desarmar las dinámicas donde un niño pega a su hermano, pidamos ayuda.


SI TODOS OPINAN QUE ESTÁ CELOSO
*Expliquemos a nuestro hijo que estamos orgullosos de él, por cómo es capaz de cuidar al pequeño, de avisarnos cuando llora, alcanzarnos los pañales o explicarnos qué le sucede al bebé cuando nosotros no logramos decodificar sus reclamos.
*Digamos a los demás que nuestro hijo está feliz por la llegada de su hermano, y gritemos a los cuatro vientos que es sumamente bondadoso con el pequeño, así el niño se sentirá reconocido en nuestras palabras y estará preparado para seguir sintiendo dicha y alegría en su corazón.
*Nombremos el cansancio, el hastío o el aburrimiento que obligan al niño a perder la paciencia. Entonces él sabrá que sabemos y comprendemos lo que le sucede, aunque no podamos ayudarlo en ese preciso momento.

por joanaa
#302147 en primer lugar,muchas gracias
me tiro toooodo el dia riñendola,lo reconozco.
aver,la pequeña tiene un año y esta empezando a andar,pero de la manita.con un año,como imagiaris,empieza a repetir gestos,es super simpatica,gatea....
yo tengo clarisimo que lo que le pasa a la mayor son celos.
Casi todas las noches nos quedamos las dos en la camite leyendo un cuento y luego nos abrazamos.practicamente,ese es el ratin que tenemos a solas las dos.
MI marido viene bastante tarde,juntas(las 3),la llevamos al cole por la mañana,la recogemos,se bañan,cenan....todo las 3.salvo cuando está el papi,que ahi nos repartimos un poco.

mirad,pues esa es una cosa que no habia caido.Necesito ratines de intimadad con ella,las dos solas.
Su hermana tambien estuvo mala hace unos meses(ahora ya esta totalmente recuperada),y ahi si que lo paso peor ella porque su padre y yo andabamos locos de un lad a otro.
bueno,decidido,MAÑANA NO LE REÑIREMOS.

es que ,por ejemplo la pasada noche durmiendo en casa de mis suegros,con primos,etc....a las 6 de la mañana,chillando y llorando como una loca(con los dos al lado,porque tuvimos que dormir juntos),que ella se queria levantar....pero es que no entra en razones,no escucha.
Y yo lo cuento a amigos,y otros padres me dicen: buaaaa,a mi eso mi hija no me lo hace,yo le digo:o te callas o te saco a la calle,y se calla en seco. Y jolin,a mi mi hija como si oye llover,que no reacciona a ninguna de esas amenazas.
muchas gracias,y os cuento.GRACIAS
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por Asma
#302190 Hola, pues a ver que pasa, pero yo pienso que reaccionara bien, a mi me paso parecido y con enfados y gritos la verdad es que no consegui nada de nada, pero si con mucha paciencia y comprension. Ya nos contaras.

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por joanaa
#302235 bueno,pues la cosa ha ido algo mejor.lo de a paciencia y tal...si,que en la teoria está guay,perocuando te toca, y se pone a chillar a las  tantas de la mañnaa,en una casa ajena con mogollond e gente....pues la paciencia se agota,la verdad.os ire contando,a ver como vamos evolucionando.gracias y feliz año nuevo.