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- Mar, 15 Mar 2011, 12:19 #388492 Pues no se como he ido a parar a leer esto, asi que os lo cuelgo para poder leer las veces que nos haga falta y entender algo que a mi personalmente se me olvida aveces, en esos momentos chunguillos que pasamos y gritamos.
no al grito, no al grito, no al grito, porque mi hija se esta convirtiendo en mi espejo, una gritona, espero poder ponerme remedio y asi que la imagen que se refleje en ese espejo cambie por el bien de las dos.






Algunas personas se preguntan por qué los padres gritan a sus hijos. A continuación les explico la lógica que hay detrás de esta acción.

¡Los chicos pueden ser tan exasperantes! Puedes llamarlos, y volver a llamarlos y no vienen. Les gritas y les explicas y no escuchan. A veces les tienes que pegar cuatro gritos para que te presten atención. Entonces, cuando les gritas, por fin te toman en serio.

Otra buena razón para gritar es que te ayuda a que puedas desahogarte. Es muy frustrante andar corriendo todo el día de aquí para allá, haciendo los mandados, trabajando, llevando la casa, ocupándote de todo el mundo para, después de todo esto, tener que lidiar con un hijo para quien la idea de una diversión es fastidiar de todas las maneras posibles al bebé en su hora del baño. ¿Cuánto puede soportar una madre? Al gritar liberamos las tensiones y así evitamos desarrollar úlceras.

Y dicho sea de paso, a nosotros nos gritaron mucho y salimos bastante bien. Nos convertimos en correctos y equilibrados miembros de la sociedad. Bueno, quizás no tengamos la mejor relación con nuestros padres pero, lo principal es que el resultado no ha sido malo.

Por último, no lo podemos evitar. Gritar está en nuestros genes y es una reacción que surge de los modelos que nos brindaron nuestros padres. Es natural. Lo que se aparta de lo natural es no gritar. Exige mucho autocontrol, es algo así como dejar de consumir azúcar, café y harinas blancas por el resto de nuestras vidas. Si partimos de la base que no deberíamos gritar, entonces nuestras cuerdas vocales vendrían pre-programadas en Mute.

Es así, son las explicaciones (¿racionalizaciones?) más comunes y corrientes para justificar los gritos que hemos recibido de nuestros padres. Y, aunque todas contienen elementos de verdad, hay otra cara de la moneda que debe ser considerada. Cuanto más gritemos a nuestros hijos, mayor será la cantidad de hábitos nerviosos que van a desarrollar. Cuanto más griten los padres tanto más aumentarán los síntomas del estrés, tales como arrancarse el pelo, escarbarse la nariz, parpadear, mojar la cama y otros. Cuanto más gritemos, peor será la salud física de los niños: más dolores de cabeza, de estómago, resfrios y gripes. Cuanto más gritemos, mayores serán los problemas de conducta de nuestros hijos: desobediencia y desafío en casa o el colegio.

Cuanto más gritemos, más problemas sociales tendrán nuestros hijos: serán víctimas de hostigamiento, o serán hostigadores, les costará hacer amigos y mantenerlos. Y, cuanto más gritemos, mayor será la tendencia de nuestros hijos a presentar falta de concentración para hacer los deberes. Ningún niño proveniente de un hogar donde se grita presenta toda esta sintomatología en forma simultánea; la vulnerabilidad individual de cada niño determinará el o las áreas de funcionamiento que podrán verse afectadas.

Y todavía queda más para agregar. Si les gritamos ininterrumpidamente durante dos décadas (es decir, durante los años de la adolescencia) entonces, una vez adultos, tenderán a presentar: más desórdenes de personalidad, más problemas de relación, más depresión y ansiedad, más problemas de salud, más dificultades como padres, más disfunciones de todo tipo posible.

Cuanto más gritemos a nuestros hijos, menos les vamos a agradar. Cuanto menos les agrademos, tanto menos querrán parecerse a nosotros. Al no identificarse con nosotros, posiblemente también rechacen nuestras enseñanzas, nuestros valores y cualquier cosa que queramos impartirles. Por eso, cuanto más gritemos, menos influiremos sobre nuestros hijos para que sigan por el camino que queremos que recorran. Cuanto más gritemos a nuestros hijos, tanto más se verá amenazada nuestra capacidad para transmitirles nuestra herencia judía, enseñarles a diferenciar entre el bien y el mal y compartir nuestras lecciones más importantes.

Además, hay grandes posibilidades que los niños a quienes gritamos con frecuencia durante dos décadas, no nos van a querer mucho cuando lleguen a ser adultos y se vayan del hogar. Algunos no nos volverán a hablar nunca más. Otros tratarán de mudarse al otro lado del mundo y, solo muy de vez en cuando, nos llamarán. Algunos se quedarán viviendo bastante cerca como para discutir con nosotros toda la vida. Veremos –o no- a nuestros nietos. Y muy posiblemente nuestros nietos también reciban gritos porque hemos incorporado un "programa de gritos" a su crianza. Cuando les gritamos a nuestros hijos, también les estamos gritando a nuestros nietos, bisnietos y... a los que vendrán.

De modo que, aunque por todas las razones anteriores sea tentador gritar, el precio para obtener un poco de colaboración es demasiado alto. Por suerte disponemos de una serie de poderosas alternativas para lograr la colaboración de un niño. Vale la pena tomarnos el trabajo de aprenderlas.

- Mar, 15 Mar 2011, 12:35 #388495 gracias guapa, yo me lo apunto....que soy demasiado impulsiva y se me escapa tó....

Miss Maléfica dixit.
"Gigoló" (vividora) de la maternidad
¡Va por Queli!
Yo de mayor quiero ser.... EMPODERANTE
¡Va por Lolilolo!

- Mar, 15 Mar 2011, 13:06 #388502 Otra que se apunta. Mira que intento trabajarlo, pero a veces...menos mal que mis hijso me ayudan, caundo me dicen "mama, porque gritas como una loca"

maca, conocida en al tribu como Macarena Sheridan



Mon....ande andarás?????

- Mar, 15 Mar 2011, 13:12 #388505 Jajaja Mac, mi hijo también me lo dice. Y además me añade que si le grito, le pongo nervioso y que hago que le entren ganas de gritar. Así que ya ves, con una explicación así, no me queda otra que mirarle a los ojos y decirle que lo siento porque lleva toda la razón del mundo.

Miss Maléfica dixit.
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- Mar, 15 Mar 2011, 13:20 #388509 A pesar de que me considero una madre muy cariñosa y atenta con mi hijo, yo también grito. No he aprendido a reconocer el momento en el que ya no puedo más, justo el segundo antes de llegar al límite de mi paciencia y empezar a contar hasta 10, me pilla por sorpresa y grito (bueno, tampoco me pongo como una loca, ni que lo haga muy a menudo, pero se puede decir que levanto la voz bastante).

Es curioso porque mi infancia fue bastante infeliz por varios motivos, y una de las cosas que recuerdo con más fuerza y que más me entristecen aún ahora son los gritos constantes de mi madre (no es que ella sea mala, era la situación que vivíamos, que la tenía de los nervios). Yo nunca pude estar tranquila en casa, leyendo, estudiando, jugando, siempre había esa tensión terrible en el aire. Hace poco mis compañeros del colegio hicieron una cena y me di cuenta de que no me acordaba de prácticamente de nada de esa etapa, la he borrado de mi mente, y estoy segura de que es un mecanismo de autodefensa, la época que no recuerdas, no te puede hacer sufrir.

Parece mentira como algo tan común como gritar, levantar la voz o como lo queramos llamar puede marcar tanto. Bueno, era solo una reflexión en voz alta, me prometo a mi misma intentar con más fuerzas aún no gritar a mi enano, a fin de cuentas es lo mejor que me ha pasado en mi vida, y se merece un poco de autocontrol por parte de su madre, no?

- Mar, 15 Mar 2011, 13:29 #388517 Cuando mi madre gritaba, y luego gritabamos mi hermana o yo ella decia: no me grites!

y nosotras: tu tambien gritas!!

tú haz lo que yo diga, no lo que yo haga!!!

que lista mi madre...

- Mar, 15 Mar 2011, 13:30 #388519

Cuando mi madre gritaba, y luego gritabamos mi hermana o yo ella decia: no me grites!

y nosotras: tu tambien gritas!!

tú haz lo que yo diga, no lo que yo haga!!!

que lista mi madre...

Qué bueno!!!

Miss Maléfica dixit.
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- Mar, 15 Mar 2011, 13:33 #388521 Ummm, yo creo que afectan muchas cosas en esto de los gritos. A mi no me gritaron de pequeña, la verdad es que considero mi infancia bastante feliz, aun así, hay momentos, pero coincide con momentos en los que yo no estoy bien, cansada, estresada, casi siempre, al 99,9% tiene que ver con el trabajo (últimamente demasiado a menudo, por culpa de la situación que estoy viviendo en el trabajo), y la verdad, los pobres no tiene culpa de eso, y si, merece autocontrol por mi parte., lo intento, me lo digo a mi misma, e intento no volver hacerlo, aun así hay veces….que acabo a gritos…pobres.
También influye el carácter de cada uno, mi socio si que no tuvo una infancia muy feliz, y suele gritar bastante menos que yo, es mas tranquilo.
Y como he dicho ellos también me sirven de baremo para ver que me he pasado y pedir disculpas, cuando me dicen que no grite, o cuando reaccionan con un “perdón, mama, no lo volver a hacer”…si es que son un cielo.

maca, conocida en al tribu como Macarena Sheridan



Mon....ande andarás?????

- Mar, 15 Mar 2011, 13:47 #388523 ¿Conocéis alguna técnica de autocontrol? en serio, a mí de respirar profundamente y contar hasta diez se me olvida...
Y últimamente andamos de grito en grito; y siempre he "fardado" de gritar poco (más bien soy de las gruñonas), pero cuando grito retumban las paredes, luego me siento fatal. La pequeña corre a esconderse, y el mayor, que siempre le insisto que si le grito me diga que "no me grites, mamá", que no tengo ningún derecho a hacerlo, acaba siempre abrazándome "¿me perdonas mamá?, y me derrumbo (también soy de las lloronas).

- Mar, 15 Mar 2011, 14:11 #388527 Pues a mí me gritaron un montón y por desgracia es un recurso que tengo bastante asumido .
A ver, no es que me pase el día dando alaridos, pero llega un momento en que, después de haberle pedido las cosas bien incontables veces sin éxito, se me escapa el TE HE DICHO QUE HAGAS ESTO DE UNA VEEEEZ y enseguida me arrepiento . No es todos los días, pero hay temporadas peores que otras. Lo que peor llevo es que me doy cuenta de que cuanto más nerviosa esté yo por los motivos que sea, más frecuentes son estas situaciones. para mí misma.
¿La mejor técnica de autocontrol? Mi hijo, que en ese momento me devuelve a la realidad y consigue espantar al monstruo que llevo dentro con frases tipo "así no se piden las cosas", "pídemelo bien y lo haré" (al final lo bueno también cunde ), así que al final acabamos abrazándonos, yo le pido perdón por haber gritado y él por no haberme hecho caso o lo que sea y todos contentos.

♥ Mamá de dos polluelos que dieron forma a mis sueños y los hicieron realidad ♥
Escritora, bloguera, traductora, y un montón de cosas más...
Mi blog: El mundo de Kim

- Mar, 15 Mar 2011, 16:23 #388536 Otra q se une al club y eso q a mi casi nunca me gritaron pero a veces me resulta imposible no gritar cuando estas haciendo algo y no llegas y ella mama ven mama ven mama ve y cuando no puedo mas el grito al canto poco a poco hay q evitarlo.

Sonia

- Mar, 15 Mar 2011, 16:38 #388540 Pues sí, hay veces en que pierdo el control y le grito y es cierto que coincide con momentos en los que yo también estoy mas nerviosa o en días en los que él está más nervioso. Pero lo bueno es que lo reconocemos y sabemos rectrificar, es muy importante saber pedir perdón y poner palabras a todo lo que hacemos tanto lo bueno como lo no tan bueno. Está claro que lo mejor es no gritarles, pero por lo menos reconocerlo y hacérselo saber.

Tote y Toño, papás del gran Unai y del pequeño Eric

- Mié, 16 Mar 2011, 01:28 #388584 Hola!! Vaya casualidad!!! Entraba hoy en el foro porque me sentía fatal por un episodio que ha ocurrido esta mañana con mi peque y he visto que andamos todas un poco igual. No es que me alegre, sino que muchas veces cuando pierdo los nervios y pienso en lo que me gustaría saber hacer y no sé (porque yo tampoco lo he recibido de pequeña, mi casa era de gritos, zapatilla y de vez en cuando cinturón por parte de mi madre y de pasotismo total y burlas por la de mi padre) pienso en este foro y en vosotras y pienso que me gustaría ser de otra manera. Aunque sigo pensando que me gustaría ser una persona equilibrada emocionalmente hoy al leeros no me he sentido tan rara, extraña y mala como hago a veces. No justifica para nada el comportamiento tan horroroso que he tenido esta mañana con mi pequeñín pero por lo menos me doy cuenta de que no estoy sola en esto. Gracias a vosotras como siempre me siento mejor y con más ganas mañana de ser mejor persona y por supuesto de ser mejor madre.

Hoy he estado apunto de perder los nervios y la razón. En mi cabeza le he soltado un tortazo a mi hijo. Es una cosa que nunca haré porque yo los he recibido y recuerdo perfectamente como me sentía, el odio que aún recuerdo y siempre he dicho que mis hijos nunca sentirán algo así por mí y porque sería incapaz de hacer tanto daño a las personas que más quiero en esta vida. Lo que pasa es que tengo mellizos de 3 años. Un chico y una chica. Seguimos con teta y durmiendo juntos por lo que no descanso mucho. Tampoco van a la guarde por lo que estamos 24 hrs. juntos. No quiero comparar entre ellos y de hecho nunca lo hago pero para que entendáis un poco lo que sucede os diré que ella es un "bichillo" pero no me pone nerviosa. Mi pobre peque lo tiene todo. Tiene un carácter más difícil. Creo que con él no lo estoy haciendo bien. Él es el que se pilla las rabietas y es capaz de llorar durante una hora aunque le consuele, intente abrazar, besar... suele en esos momentos intentar pegarme. Si le explico que si me pega saldré de la habitación y hago mención de irme se pone aún peor pero si me acerco lo mismo. Como son dos en esos momentos a veces también me reclama la peque y entonces aún se complican más las cosas. Siempre que se levantaba de la siesta se pasaba también sobre una hora llorando. De hecho si se duerme en el coche volviendo a casa al bajarlo ya tenemos lloros. Me pide todas las cosas llorando, sin hablar. Muchas veces le digo que no le entiendo que por favor me hable y me pida las cosas bien. Algunas veces me lo repite bien otras pilla rabieta. Es muy fuerte y siempre acaba haciéndome daño cuando jugamos o dándome alguna patada (sin querer pero duele igual) o algún cabezazo como esta tarde que hasta se me ha hinchado el labio. Tira todo por el aire. Acabo de vestir a su hermana y dejo por ejemplo el pijama doblado y en cuanto me descuido lo tira todo al suelo. Le encanta tirar los juguetes volando o por la escalera. Esta mañana mientras le ataba en la silla del coche me ha cogido del cordón de la sudadera y ha empezado a estirar, estirar y estirar.Yo le decía Unai que me haces daño, cariño para que me haces daño, cariño por favor. Pués hasta que no le he gritado no ha parado. Esta mañana estaba desayunando en el sofá y ha empezado a golpear la lámpara de pie que es como un flexo que tenemos en el comedor contra la pared. Le he dicho un montón de veces que no haga eso que la rompe y que es peligroso para él, pués ni caso. Me diréis que la quite pero ya lo hice en su momento lo que pasa es que ahora la necesito porque pinto cuadros y sino pués no veo. Luego mientras hacía yo la comida (poco rato después) se ha subido al sofá, por la ventana que da a la cocina ha metido el cuerpo y ha cogido una cuchara de palo. Se la dejo muchas veces cuando me "ayudan" a cocinar. La intentaba meter en la bolsa del papel reciclado. Le he pedido un montón de veces qe no la pusiera allí porque luego no nos acordaremos y la perderemos. No es una gran perdida pero en estos momentos sólo me quedan dos porque 4 las rompieron un día jugando a tocar el tambor. Luego se ha estirado otra vez por la ventana y se ha puesto a golpear con la cuchara la olla que tenía en el fuego con aguar hirviendo para la verdura. Le he explicado que eso era muy peligroso varias veces y el erre que erre. No contento se ha puesto a soplar el fuego de los fogones cosa que hace muy a menudo a pesar de que le he explicado un millón de veces el riesgo que supone para toda la familia. Para rematar se ha colgado (literalmente) de los cables de la lámpara que tengo colgada a modo de cortina en la ventana (es de esa de estrellitas del ikea) y después de decírselo dos veces es cuando he ido como una loca y le he cogido del brazo gritando y en mi cabeza le he hecho: zas,zas. Se ha puesto a llorar porque se ha asustado. Se me ha roto el corazón y aunque le he consolado y he hablado con él me siento fatal. Además para él ha sido como si le hubiera pegado porque cuándo hablábamos me ha dicho que no quería que le pegara. Tengo el corazón en los pies. Otra cosa que me saca de quicio es que cuando se enfada con alguién se pone a hacerle pedorretas. A su hermana la quiere con locura pero cuando nos decimos cuánto nos queremos siempre dice que a ella poquito. Malena a veces cuando lo oye se pone a llorar y eso también me cabrea. Sé en el fondo que todo lo que hace son cosas de niños pero es que las hace todas él y por lo tanto casi siempre descargo contra él. Creo que lo estoy haciendo fatal y que no le estoy dando a mi hijo lo que necesita realmente. Me he hecho el propósito de pasar no más tiempo con él por que lo paso todos sino "mejor" tiempo. Prestándole más atención que creo que es lo que necesita. Bueno, siento el rollo pero necesitaba desahogarme con alguién que me pudiera entender. Un abrazo

- Mié, 16 Mar 2011, 10:25 #388589 rebeca 11176, me quedo con esto:
Gracias a vosotras como siempre me siento mejor y con más ganas mañana de ser mejor persona y por supuesto de ser mejor madre.
pasito a pasito lo vamos a consegui.
y gracias a todas por contestar, por hacerme ver que no estoy sola, una vez mas este foro nos une.
sabemos que es dificil de conseguir al menos en mi caso, porque antes de que de cuenta estoy levantando la voz.
pero podemosssssssssssssssss, ahora cuando tenga ganas de pegar un grito me acordare de todos vuestros mensajes y de este post, y espero que la barrera del silencio tape mi boca.
mil graciasssssssssssssssssssssssssssssss.
ademas de que nos vale chillar, si luego estamos fatal de mal por haberlo echo.

- Mié, 16 Mar 2011, 10:28 #388591 Rebeca, a mi me pasa como a ti, pero a otro nivel, ya que nos son gemelos, pero el mayor nunca jamás me ha dado esos problemas, y mi pequeño, con 3,5 años muchas veces se porta como tu describes que hace el tuyo.
Note voy a dar una formula mágica, porque no la hay, solo decirte que no te sientas mala madre, que como has visto todas perdemos los nervios alguna vez, y que si, que es muy frustrante ver que aunque le expliques y le digas no hace caso y que te pega, porque el mío también ha hecho eso.
Solo decirte que siga as así, controlando los nervios, y que algunas veces a mi me funciona el llevarlo a él a otro lado, a su habitación, cerrar la puerta y decirle que cuando se calme lo hablamos. Suele funcionar, al cabo de un rato , apenas un minuto, viene corriendo, se coge del brazo, llora un ratito pero se calma.
Debes estar orgullosa de no repetir comportamientos, es muy difícil que un niño criado a gritos y bofetones no lo repita con sus hijos, así que deberías sentirte bien.

maca, conocida en al tribu como Macarena Sheridan



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