- Lun, 04 Jun 2007, 15:05
#147476
A Carlota antes le pasaba lo mismo (ahora que tiene 20 meses parece que se da más cuenta de las malas intenciones del otro niño o niña y lo previene ella misma mejor: no se acerca ni se mete si no lo ve claro o se aleja a tiempo) y yo, siguiendo consejos de Sole, intentaba anticiparme siempre para evitar los golpes (aún suelo estar ojo avizor) y siempre digo algo parecido a que "pegar hace daño" "los niños no quieren jugar con los que pegan", "pegando no se hacen amigos"
Si el que pega es mayor además de decir que nunca se pega ni se abusa de un pequeño suelo intentar impresionar con lo de "¿Qué te parecería si yo te pegara a ti que soy mucho más grande y fuerte?". Esto último con los mayorcitos es muy muy efectivo, se suelen quedar aparentemente muy pensativos y dejan el comportamiento agresivo...
Eso sí, a pesar de que carlota va siendo cada vez más autónoma y se maneja mejor, no dejo de implicarme en todos los juegos en grupo en los que hay peligro de disputas con golpes, entre otras cosas ´también para enseñarle a ella y para evitar que sea ella la que los dé. Me explico, por ejemplo, si Carlota está en el arenero con otros seis o siete niños de edades diversas jugando con lod cubos y palas, yo me siento con ellos y hago de arbitro en lo conflictos, estableciendo turnos y explicando que hay que esperar a que uno acabe con un rastrillo para cogerlo, que no se quitan los juguetes a lo burro, sino pidiéndolos... y así.... Y cuando el resto de madres/padres/cuidadoras no colabora y están simplemente a lo suyo y la situación empieza a ser difícil (todos quitándose los juguetes unos a otros a mamporrazos) pues intento que todos me ayuden a hacer una gran tarta o un gran agujero o algo así, algo que sea una tarea en al que todos puenen aportar algo y suele funcionar. Normalmente el resto de padres ayuda si son majos o pasan, aunque supongo que alguno debe pensar que soy una pesada intervencionista y que me estoy poninedo perdido el pantalón y que están mejor solos los niños, que así aprenden...
y desde el otro lado del asunto, te cuento que Carlota se pone nerviosa en lo alto del tobogan si viene otro niño o niña detrás muy cerca, parece que le da miedo que le empujen y a veces quiere empujar al que va delante, como si tuviera prisa, no lo hace muy fuerte, pero lo intenta (supongo que en alguna ocasión la han empujado y de ahí el asunto, o que experimenta, no sé) En estos casos también intento anticiparme siempre y evitar que lo haga y todas las veces censuro con seriedad la situación,explicandole que a mam´no le gusta, y diciendo que empujar es peligroso, que hace daño, y explicando que allí arriba haya que estar tranquila, y esperra el turno. Suele funcionar también, nunca suele repetir el impulso en la misma tarde, y cada vez lo hace menos...
Pues eso